El 21 de noviembre del 2017 tres jóvenes amigos volvían del colegio cuando decidieron no ser espectadores de una tragedia y salvaron la vida de un suicida a punto de lanzarse del paso elevadoA10 en Waltham Cross en Hertfordshire, Inglaterra.
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En una acción que pareciera planeada, Devonte Cafferkey, de 13 años, y Sammy Farah, de 14, fueron rápidamente a afirmar al hombre e intentar persuadirlo para que no se lanzara, mientras el tercero, Shawn Young que tenía 12 años, fue a pedir ayuda, narra el Daily Mail.
Los tres jóvenes, que se han vuelto todas unas celebridades en su ciudad, fueron invitados al programa de televisión This Morning donde contaron detalles del hecho.
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«Sí, fuimos los primeros en llegar. Lo estábamos persuadiendo para que no saltara. Estaba llorando y secándose los ojos. Y le dijimos: ‘Tienes familia y esas cosas, no vale la pena'», confesó Cafferkey.
A la heroica acción se sumó James Higlett y Joanne Stammers, una mujer de 47 años que se aferró fuertemente al suicida a pesar de que eso significara quedar llena de hematomas producto de la extraña enfermedad que le impide trabajar, el síndrome de Klippel-Trénaunay.
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«Estoy extremadamente orgullosa de los tres, todos son buenos chicos», señaló la madre de Shawn Young, de acuerdo con el medio inglés.
Los tres pequeños héroes y sus dos «ayudantes» serán premiados por una organización benéfica que busca que se salven vidas en situaciones de suicidio, la Royal Humane Society, y fueron nominados a los galardones que entrega la policía de Hertfordshire.