Durante meses el mundo estuvo expectante sobre el futuro del Tiangong-1, la estación espacial china que se dirigía en caída libre sobre la Tierra.
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Y esta noche finalmente el laboratorio se precipitó en nuestro planeta, cayendo en la región central del Pacífico Sur.
Sin embargo, de acuerdo al astrofotógrafo Arturo Gómez, la realidad pudo ser distinta si el satélite se precipitaba 17 minutos antes.
Según señaló a Radio Bio Bío, «en nuestro horario continental chileno, la caída se produjo a las 21:16 horas, es decir, estuvo solamente a 17 minutos de la costa chilena, frente a Osorno».
«Se esperaba que cruzaría cielo chileno, por sobre Osorno a las 21:33 horas», afirmó.
Gómez señaló finalmente que el Tiangong-1 no es el único laboratorio del gigante asiático, ya que «hay que recordar que aún queda otra estación china en el espacio, que fue enviada en septiembre de 2016: la Tiangong-22».