“Cualquier pasión que haya tenido por este trabajo me ha sido arrancada por completo”. Así de tajante fue la profesora Julie Marburger en un revelador posteo en Facebook en el que señala que se aburrió de las faltas de respeto de alumnos y apoderados, del poco compromiso y de las condiciones de trabajo por lo que anunció que dejara la enseñanza.
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La maestra de sexto grado del Cedar Creek Intermediate School en Texas descargó toda su frustración en la red social y generó todo un debate luego de que se viralizara con más de 391 mil compartidos y casi 300 mil reacciones.
Julie parte poniendo en contexto el día en que tomó la drástica decisión asegurando que dejó el trabajo temprano “después de un incidente con un padre que me dejó emocionalmente incapaz de continuar”.
“Tomé la decisión de dejar la enseñanza a finales de este año… Los padres se han vuelto demasiado irrespetuosos y sus hijos son aún peores”. La maestra se queja que la administración del colegio, además, siempre busca mantener “contentos a los padres”, por lo que se queda sin opciones de “hacer el trabajo para el que me contrataron. Enseñar a los niños”.
La profesora incluyó en la publicación varias fotos, donde se puede ver el aula sucia e implementos rotos y en malas condiciones, y asegura que muchos de los “artículos dañados o destruidos” son de su propiedad porque no le entregan “presupuesto para las clases”.
Julie cuenta que en la semana se publicarían las calificaciones y que “casi la mitad de sus aproximadamente 140 estudiantes serán reprobados debido a múltiples tareas faltantes”, y dijo que al parecer a los padres no les importaba, ya que no respondieron a «los informes semanales, correos electrónicos y llamadas”.
“Nunca escuché hablar de una profesión en la que las personas dedicaran tanto corazón y alma a su trabajo, tomando tiempo y recursos de su hogar y su familia, y cobrando una cantidad tan insultantemente mezquina. Los docentes son algunas de las personas más amables y generosas que he conocido, sin embargo, son tratados de manera irrespetuosa por todos lados”, apunta.
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Finalmente, Julie termina su posteo señalando que “muchos dirán que no debería publicar estas cosas en las redes sociales, que debería promover la educación y ser positiva, pero ya no me importa. Cualquier pasión que haya tenido por este trabajo me ha sido arrancada por completo. Quizás pueda ser la voz de la razón. ESTO TIENE QUE DETENERSE”.