A partir del 25 de mayo, WhatsApp restringirá su uso para mayores de 16 años. Hasta ahora, el mínimo era de 13 años. En Chile, según el último «Estudio de Usos, Oportunidades y Riesgos en el Uso de TIC» el 80% de los menores entre 9 y 17 años reconoce que usa WhatsApp y Facebook para tener contacto con sus conocidos. Esto no fue una decisión a la ligera.
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La nueva restricción será a establecida por la entrada en vigencia de la nueva Ley de Protección de Datos (GDPR por sus siglas en inglés) en toda la Unión Europa el próximo 25 de mayo.
Niños usando WhatsApp
Con esto, Whatsapp se verá obligado a que sus políticas ayuden a que los menores no se expongan a contenido inapropiado. La política sería aplicada de manera global, ante la necesidad de adelantarse a las nuevas medidas de seguridad que se aplicarán también en otros puntos del globo a causa del escándalo de Facebook y Cambridge Analitycs.
La efectividad de la medida en sí es cuestionable. En la actualidad la aplicación estaba restringida para menores de 13 años, pero los números ya señalan que en nuestro territorio nacional la aplicación es altamente utilizada por niños de incluso 9 años de edad.
Ni los niños, ni sus padres, ni la mayoría de los usuarios se molestan en leer las condiciones de uso de las aplicaciones. Solo se preocupan de saltárselas lo más rápido posible.
Padres y tutores responsables
Pese a aquello, WhatsApp al explicitar en sus términos que solo los mayores de 16 años pueden ocupar la app, se libra de responsabilidades legales. Si algo le ocurriese a los menores edad durante el uso de la aplicación, sería responsabilidad de los usuarios o en este caso de sus tutores y no de WhatsApp.
Hasta ahora no se ha confirmado si desde WhatsApp exigirán la imagen de alguna documentación de identidad, como lo hace Facebook en los casos que se hace necesario confirmar la identidad del usuario.
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«Tiene que haber una buena educación en casa sobre los riesgos que existen en una red social, como el acoso. Muchos papás permiten que los hijos tengan WhatsApp para comunicarse con ellos, pero no los educan sobre estos riesgos que hay detrás», señaló a Publimetro la psicóloga de la Universidad del Pacífico, Sofía Fiedler.
«Podrían utilizar alguna aplicación que restrinja la comunicación con números extraños, pero eso sería restringir. Nunca habrá un mejor seguro para esto que educar», añadió.
