El apellido «lite» a veces puede generar cierta desconfianza. Es que muchos consumidores no están dispuestos a considerar opciones «livianas» de otros equipos. Sin embargo, con este teléfono, Huawei ha demostrado que si se pueden desarrollar terminales de gama media, con características de gama alta a un buen precio. De hecho, este equipo podría catalogarse en una gama media alta, compitiendo tranquilamente con gama altas de años anteriores.
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Si bien, es distante a sus poderosos hermanos mayores Mate 20 y Mate 20 Pro, es una increíble alternativa si quieres un buen teléfono a buen precio. Como en generaciones anteriores, este teléfono hereda las líneas de diseño de sus hermanos de catálogo, pero recorta algo las prestaciones para competir en una línea más reducida de precio.
Aspecto premium
Pero ojo, porque este equipo también dio un salto en sus materiales. Es el primero de la gama Lite de Huawei que apuesta por el cristal. Pese a aquello, lamentablemente no cuenta con carga inalámbrica. Aún así, su diseño se ve exquisito. Su parte frontal no cuenta con botón alguno, contamos con pantalla completa, solo interrumpida por un notch.
En cuanto a botones, si cuenta con volumen y encendido en el marco izquierdo, marco derecho reservado para la bandeja de la microSD y la SIM. ¿En la arte inferior? El puerto de carga USB tipo C y el jack de auriculares, junto a un altavoz.
Cámara y lector de huellas
Su parte trasera trae algunas de las características más cotizadas de la última generación: cámara dual en la parte central, situada en vertical y el lector de huellas bajo ella. Y también cuenta con cámara doble en su frontal. Es que la fotografía es uno de los fuertes de la marca china.
Y si bien no tenemos zoom óptico, sí tenemos desenfoque selectivo en ambos lados del teléfono. Un efecto bokeh logrado gracias a la inteligencia artificial
Hablemos de números. En su parte trasera tenemos un sensor de 20 megapíxeles, haciendo las veces de sensor principal, con una lente f/1.8 y una distancia focal de 27 milímetros. Junto a él, un segundo sensor de 2 megapíxeles cuya única función es la de las lecturas de profundidad.
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Respecto a las selfies, el sensor principal es de 24 megapíxeles y está acompañado por una lente f/20 y 26 milímetros. El principal es de nuevo una gran angular, mientras que el segundo sensor es de 2 megapíxeles.
El corazón del equipo: Kirin 710
Desde hace bastante que Huawei apuesta por sus propios procesadores. En esta oportunidad hablamos del Kirin 710. El procesador se comporta bastante bien en casi todas las situaciones. Pero en general tiene un buen rendimiento, recordemos que lo acompañan 4 GB de Ram. Los ocho núcleos del Kirin 710 llegan 2,2GHz y la GPU es una Mali G51 MP4, duplicando los núcleos de renderizado.
Finalmente en su almacenamiento interno el equipo cuenta con 64 GB. Hablando de batería, otro de los fuertes de la marca, su energía da para más de un día de uso sin problema alguno. Su carga es rápida, el cargador especial viene en la caja. ¿Tamaño? Tiene una capacidad de 3.750 mAh. Más que suficiente.
Evaluación general
Después de utilizar el equipo por un par de semanas, hay varias cosas que destacar. Su batería, la calidad de sus materiales y el desempeño de procesador son lo mejor. Entre las cosas que podrían ser mejor, pondríamos sus cámaras. Que si bien, son bastante buenas, no son como los modelos Mate 20 o Mate 20 Pro, claramente hay que entender la diferencia de precio.
Nos extrañó que, teniendo la parte trasera cubierta de cristal, no le pusiera carga inalámbrica. Pero realmente no es algo vital ni que se extrañe: la carga rápida propia del equipo es mas que suficiente. Si buscas un equipo eficiente, con buena batería y buen precio, Mate 20 Lite es sin duda una excelente alternativa.