Pensar en nuevas opciones para tus muros va mucho más allá de una capa de pintura o atreverte con un color que te saque de tu zona segura. El papel tapiz se ha convertido en un gran aliado no sólo para aquellos que no quieren intervenir directamente sus paredes, sino también para los que buscan destacar su personalidad y ambientes mediante este increíble material.
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“Todavía la elección del papel mural es algo tímida, no es algo que la gente tenga muy en mente al momento de elegir su espacio para vivir”, nos cuenta Gonzalo Balmaceda, uno de los fundadores de Hued Hued (@huedhued), que además de ser el nombre de un ave autóctona chilena, es un proyecto de diseño con identidad que busca rescatar el patrimonio natural de nuestro país, mediante la ilustración y los objetos de decoración de autor, catálogo en el que destacan sus originales papeles murales.
La realidad, en Chile, es que no lo estamos considerando aún como una de las primeras alternativas, sin embargo el mercado sigue fiel a él con la creación de iniciativas como Hued Hued; la evolución del tapiz a texturas 3D, y hasta el papel mural autoadhesivo, que se puede aplicar directamente a la pared sin generar ningún daño por ser extremadamente sencillo de remover sin dejar huella de pegamento o restos de material.
“El papel es diseño, es ilustración. No es moda”, dice Balmaceda, quien desde el sur confecciona y crea su trabajo. “El papel mural y el diseño de patterns es algo sumamente antiguo y se mantiene hasta el día de hoy vigente. Obviamente las tendencias hacen que en ciertas épocas se utilice más o menos, que sea más cool o que sea anticuado, pero la verdad es que no nos importan ese tipo de cosas porque el papel mural es un elemento precioso cuando está bien hecho”, y eso está lejos de cambiar.
Procede de Oriente y llegó a Europa en el siglo XVII, siendo la Revolución Industrial su primer éxito masivo debido a la fabricación por mecanización. Y hoy, estamos llenos de opciones, en todos los precios: desde el diseño de autor hasta de grandes tiendas, con patrones sobrios, mapas, animales, colores neutros, y hasta caras de personalidades del espectáculo.
Para el ilustrador de Hued Hued, cualquier espacio puede quedar bien con esta intervención “si es elegido de manera correcta, según el estilo que uno quiera desarrollar. Puede quedar bien en un sólo muro del comedor, en todos los muros del living, y en habitaciones como el baño”. Depende de la luz, de la decoración y del patrón elegido. “He visto mis papeles en techos y se ven preciosos. A mí me encanta cuando son bien diseñados, cuando el pattern está bien elegido, cuando no se nota el módulo de conexión”.
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El mundo del tapiz da para mucho, así que si tomas la decisión de decorar tus muros con él, no sólo te invitamos a probarlo en paredes poco convencionales como el techo, las barandas, o pilares y arcos; porque tu casa está llena de superficies ideales para combinar, destacar y potenciar esos detalles abandonados.
Puedes ocupar este material para mucho más que tus paredes. ¿Qué te parece hacer envoltorios de regalo con un patrón hermoso y con terminaciones más personalizadas que con uno convencional? El arte del forrado combina perfecto con el tapiz, y bajo esa lógica puedes obtener tarros y cajas para lucir nuevos floreros o compartimientos, o una nueva pantalla de lámpara llena de patrones. La idea es utilizar la creatividad a tu favor y ver hasta dónde permiten tus espacios: la puerta de entrada a tu cuarto o las puertas del clóset pueden lucir increíbles si encuentras una paleta de colores y trazos que se adapte a tu línea de decoración.
La base de tu hogar también puede redecorarse. Los espacios que quedan entre los peldaños de la escalera son ideales para pegarles papel y salir de la convención de color plano. Medir el fondo de tus cajones y forrarlos realzará ese lugar siempre abandonado, lo mismo tus bancos y sillas de madera. Interruptores de luz y bordes de muebles son sólo otras ideas donde se puede aplicar el papel mural.
Las opciones están en el mercado y en tu intención creativa. Opciones con efecto corrugado, de madera, loza y hasta ilusión de estanterías están disponibles en las tiendas. “Las paletas de color son fundamentales para que el diseño quede bien”, recomiendan desde Hued Hued, donde trabajan con mezclas que van desde el verde con mostaza, rosa pálido, rojo anaranjado y café chocolate; hasta paletas más reducidas como el petróleo y rosa pálido, el blanco y arena, el azul y el blanco, o el celeste viejo y rojo.
Las recomendaciones a considerar son “un papel grueso y rugoso, con buenas tintas, ojalá ecológicas”, que en Chile están disponibles en fábricas como Decomural o Carpenter. “En cuanto al diseño, a mí me atrae la vieja escuela. Los patrones japoneses y los franceses, por sobre todo. Que no sean de bloque, si no que saltados o de medio paso, y con encaje entre las figuras, cosa que sea muy difícil encontrar el módulo original que lo conforma”.
