Consejos tecnológicos para mantener el orden y la limpieza en el hogar sin morir en el intento

El fenómeno de Marie Kondo, la gurú japonesa de la limpieza, ha causado revuelo desde la aparición del libro “La Magia del Orden” en el 2014. Un escrito que explica cómo lograr la paz e inspiración en la vida, mediante el almacenamiento de las cosas en un lugar adecuado y quedándose solamente con lo que realmente amas y te hace feliz. Una especie de “feng shui” que muchos han integrado a sus vidas y que hoy se potencia mediante el uso de la tecnología.

Pero independiente de los consejos que entrega la fórmula KonMari – método usado por la consultora en organización- en la popular serie de Netflix, también existen otras alternativas que ayudan a mantener el orden y la limpieza en tu casa de manera fácil y automatizada.

El apoyo de las apps

“Hoy, en la era digital, las aplicaciones relacionadas al orden se han hecho más populares tras este fenómeno mundial, es por esto que invitamos a todo el que tenga un Smartphone, a sacarle provecho a la tecnología móvil, y utilizarla de forma positiva para aprender a ordenar sus tareas, espacios y vida”, explicó Fernando González, Gerente de Smartphones de Samsung Electronics Chile.

Si eres de los que ha intentado todo pero sin lograr resultados, aquí te sugerimos algunas aplicaciones que buscan facilitarte la vida. Todas, descargables desde tu celular:

1. Dommus: Con esta herramienta puedes generar una organización familiar, construir equipos encargados de distintas tareas y disponer de información al instante y sincronizada.

1. OurHome: Una aplicación que promete gestionar tareas, eventos y crear listas de compras entre los participantes, logrando un funcionamiento realmente transformador y con el mínimo esfuerzo.

1. Mothershp: Es un sistema enfocado en los más pequeños de la casa que entrega recompensa por los objetivos cumplidos, incentivando la responsabilidad de una forma más lúdica.

1. FamilyWall: Este método también está enfocado, principalmente, en los más pequeños. Una forma fácil de enseñar a los niños tareas simples y rutinarias como lavarse los dientes después de cada comida, recoger la mesa o preocuparse de alimentar a la mascota.