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¿Tiene el breakdance la exigencia física de una disciplina olímpica? Con la confirmación de que falta muy poco para que el Comité Olímpico Internacional (COI, por sus siglas) ratifique su inclusión como competencia oficial en París 2024, la pregunta ha tomado fuerza en el ambiente deportivo. Junto al skateboarding, la escalada deportiva y el surf, esta expresión de baile se proyecta como una de las sorpresas para la próxima edición de los juegos de París 2024, desplazando incluso a disciplinas más tradicionales como el karate.
“Los cuatro deportes que París ha propuesto están totalmente en línea con la Agenda Olímpica 2020, porque contribuyen a que el programa sea más equilibrado en cuanto a género, y más urbano, y ofrecen la oportunidad de conectarse con la generación más joven», dijo el presidente del COI, Thomas Bach.
En ese contexto, una empresa de tecnología decidió medir la exigencia de esta disciplina con un smartwatch. En este caso, Samsung le propuso a Felipe Rivas, alias B-Boy Airflipe, uno de los mayores exponentes chilenos del breakdance, que realice dicha actividad usando el Galaxy Watch Active. Rivas tiene más de 24 años de carrera y un palmarés que incluye el primer lugar en ocho campeonatos nacionales, seis campeonatos sudamericanos y la medalla de oro en el campeonato escandinavo de 2001.
1.000 calorías en tan solo 4 horas
Rivas desplegó pasos de Breakdance durante toda una jornada en distintas zonas urbanas de Santiago, mientras el Galaxy Watch Active en su muñeca fue monitoreando las pulsaciones de su corazón y las calorías quemadas, entre otros datos.
Al cabo de unas cuantas horas de ejecutar los pasos y movimientos más tradicionales del deporte -ad portas de ser olímpico-, Felipe quemó más de 1.000 calorías, superando las cifras promedio en disciplinas como la natación (892) y el Tae Kwon Do (937).
“Estamos felices de que Felipe haya aceptado el desafío de medir la exigencia del breakdance, y esperamos que la tecnología lo ayude a seguir cumpliendo sus metas, ojalá en los Juegos Olímpicos de París 2024”, dijo Daniel Kim, product manager de accesorios y wearables de Samsung Electronics Chile
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Zanjada la duda respecto a la valía del breakdance como nueva disciplina olímpica, ahora solo queda esperar la última confirmación del COI, para así luchar por un cupo en los Juegos Olímpicos de París 2024. Al menos los breakdancers chilenos ya entrenan con la ilusión de algún día poder representar al país en la cita olímpica.
Para tener una referencia, una persona adulta suele quemar entre 1.200 y 2.000 calorías con la actividad física base diariamente. Haber quemado esa cantidad, en solo unas horas, hace referencia de una gran exigencia.