Una de las advertencias que habitualmente escuchamos de los especialistas en alimentación es que comer de noche no es conveniente para la salud. Sin duda, esta es una situación que nos pone en aprietos si consideramos que se aproxima la cena de Año Nuevo. Y es que muchas familias ya están pensando en la comida que prepararán para esta celebración, que por lo general se sirve alrededor de la media noche.
PUBLICIDAD
Afortunadamente, existen alternativas alimenticias y consejos que podemos poner en práctica para evitar los típicos malestares que provoca el comer de noche, como la pesadez estomacal, distensión abdominal, reflujo gastroesofágico o acidez e incluso alteraciones del sueño.
La directora de la carrera de Nutrición y Dietética de Universidad de Las Américas Sede, Viña del Mar, Gabriela Lizana, entrega una serie de recomendaciones para que podamos disfrutar de una buena cena de año nuevo.
Cena de año nuevo: alimentos livianos y fácil de digerir
En estas fiestas los alimentos que más se consumen son proteínas de origen animal (carnes) y carbohidratos (papas, papas duquesas, arroz), los que se digieren más lentamente y pueden provocar malestares.
Por ello, es preferible cenar alimentos más livianos y fáciles de digerir, por ejemplo, verduras de libre consumo, principalmente las de hojas o color verde (lechuga, repollo, apio, achicoria, pepino y espinacas y acelgas crudas). Estas se componen en su mayoría de agua y fibra, son de bajo aporte calórico y provocan rápida saciedad.
En carbohidratos, se recomienda privilegiar cereales como choclo, habas, arvejas, quínoa, avena. En cuanto a proteínas, si es que se va a preferir las de origen animal, en lo posible que sean pescado u otras carnes blancas como el pavo o pollo, que son de más fácil digestión que las carnes rojas.
Alimentación liviana durante el día
Si se va a comer de noche, y considerando que esta actividad no se realiza con frecuencia, es preferible comer más liviano durante el día. Puede ser un plato vegetariano, ensaladas verdes acompañadas huevo, e incluso una porción de legumbres. Estas últimas, tienen un aporte de fibra y proteína de origen vegetal que facilitan el vaciamiento del colon.
PUBLICIDAD
Respetar la distribución del plato y sus porciones
Tanto en almuerzos como en cena de Año Nuevo, es fundamental respetar la distribución del plato alimentario y sus porciones. Este debe dividirse en tres partes: la mitad del plato debe contener verduras, ojalá de libre consumo; un cuarto del plato debe tener carbohidratos, mientras que la otra mitad proteína.
Evitar realizar repeticiones o comer hasta quedar saturado. Comer lento, demorándose al menos unos 20 minutos. Este es el tiempo en que la comida llega al estómago, liberando hormonas que mandan la señal de saciedad.
Una buena estrategia para esta ocasión es cambiar el plato tradicional por el plato de pan, que tiene menor tamaño. Siempre partir comiendo las verduras, luego la proteína y al final los cereales.
Líquidos y bebidas alcohólicas
En lo posible, evitar las bebidas gaseosas o jugos artificiales, incluso las sin azúcar, limitando su consumo a no más de un vaso durante la cena. Se pueden privilegiar líquidos como jugos naturales, aguas saborizadas con rodajas de naranja, pepino o limón de alto poder depurativo. También se pueden consumir infusiones de té verde, jengibre, menta o ruda.
Si se va a comer de noche e ingerir alcohol, no consumir más de 2 copas. Su aporte calórico y glicémico es muy alto.
Postres
Para la cenas de Año Nuevo, tratar de evitar los postres, sobre todos aquellos elaborados artificialmente, que contienen mucha azúcar y crema, como tortas, pasteles y helados.
Preferir frutas naturales o postres caseros con leche descremada, pues son más livianos y fáciles de digerir. Algunas opciones son: macedonia, gelatina, flan, leche asada o helados caseros a base de fruta, agua y leche.
Mejores aderezos
En lo posible, durante las comidas no aderezar los alimentos con mayonesa. Para realzar el sabor de los alimentos, referir el merquén, pimienta, sal con aderezos o preparaciones como el pebre o salsa natural de yogurt con ajo y ciboulette.
Horario sugerido
Servir la cena de Año Nuevo al menos 2 horas antes de acostarse. El horario ideal es a las 22:00 horas. Esto, teniendo en cuenta que gran parte de la familia no se dormirá antes de la media noche.