Era uno de los números fuertes del día, el último número en ser confirmado y el único invitado anglo del Festival de Viña. Ya desde su llegada casi una semana antes de su presentación de esta noche, Morrissey dio qué hablar.i
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Y esta noche no fue diferente, ya que el británico, fiel a su estilo pidió apurar a la organización su salida al escenario, por lo cual la competencia folklórica fue suspendida, todo para que “Mozz” comenzara su actuación antes de las 01.00 de la madrugada.
Pero eso quedará como un detalle que tendrá que revisar la organización del Festival, ya que el sólido show mostrado por el ex The Smiths sobre el escenario de la Quinta Vergara hizo olvidar cualquier situación anexa.
Vistiendo una camisa roja y jeans, Morrissey deleitó a su público con temas de sus discos como solista y del tiempo de The Smiths, como “First of the Gang to die”, “Let me Kiss you”, “There Is A Light That Never Goes Out”, “Meat is Murder”, “I Know it’s Over”, “You have kill me”, How soon is now”, entre otras.
Un show sin interrupciones, ese fue su principal requisito a la hora de firmar el contrato con el Festival, y así sucedió, en una presentación de casi una hora y diez minutos, marcado por varios momentos peak, como al momento de cantar “Let My Kiss You” se abrió la camisa y se la quitó, quedando a torso desnudo y lanzándola al público.
Si hasta la “Tía Coty” quedó impactada con la presentación del británico, quien llevaba una vistosa cruz colgada en su cuello y que exigió no recibir ningún premio –gaviota, antorcha u otro-, él iba a entregar su música con mensaje a Viña.
Varios momentos quedarán en la retina del historial de Viña con Morrissey, como las imágenes que proyectó condenando la muerte de animales para comer o cuando preguntó por “la gaviota”.
Tras 19 temas, Morrissey terminó su show para regresar a Santiago y prepararse para el concierto de este domingo en el Movistar Arena.