Garafulic quiere lucirse en el desierto. / Photosport.
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Por Gonzalo Pérez
Boris Garafulic Litvak se toma con tranquilidad los días previos al Dakar. El chileno se concentra en cerrar el año y, como director de Vision Advisors, el piloto tiene que dejar todo listo en sus negocios antes de emprender rumbo a Lima.
Sin embargo, al empresario le quedan pocos días para olvidar el papeleo y comenzar a enfocarse en el Dakar 2013, donde su principal objetivo es quedar entre los diez mejores pilotos de autos.
Garafulic tuvo una auspiciosa participación en la pasada edición del rally y su 11ª ubicación en la categoría de autos lo motivaron a volver a correr el Dakar. El piloto nacional integra uno de los equipos más importantes de la carrera y partirá su aventura en Lima a bordo de un Mini All 4 Racing.
El team X-Raid Dimension le dio la posibilidad al piloto nacional de dejar su BMW para embarcarse en el auto que logró el primer lugar en la pasada edición del Rally. Las opciones de Garafulic de entrar al top ten son mayores y el piloto sabe que es la principal carta chilena en la categoría de los autos.
“Estoy súper tranquilo y se ha hecho todo lo que se tenía que hacer. Estoy en un equipo de primera línea y con un auto de primera línea. Espero estar entre los diez mejores, aunque este Dakar va a ser más competitivo y diferente al del año pasado. Hay que hacer las cosas bien y tengo que seguir mi propio ritmo”, dice el piloto a ocho días de iniciar el rally.
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En la próxima edición del Dakar, el chileno cambiará la estrategia que utilizó el 2012 y saldrá a buscar los puestos de avanzada desde el inicio de la carrera. Garafulic reconoce que se equivocó al esperar a sus rivales y, con un objetivo más claro, el chileno ahora intentará no ceder terreno.
“El año pasado partimos más cautos al principio y se nos hizo complicado tratar de retomar después. Por eso, este año vamos a tratar de hacer lo mejor que se pueda desde el segundo día y tenemos que intentar no cometer errores”, señala el piloto santiaguino.
Boris Garafulic llega con el aval de conducir el auto campeón del Dakar 2012 e integrar el equipo más poderoso del bivoauc, donde será compañero del actual campeón Stephane Peterhansel y su fiel amigo Nani Roma. Los antecedentes hacen que el santiaguino se posicione como el favorito de la patrulla nacional y el piloto quiere responder cruzando la meta de La Moneda entre los diez mejores del rally más extremo del mundo.
