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Los incentivos en el fútbol chileno siempre han estado y la práctica siempre se hace para ganar un encuentro no para caer estrepitosamente en la cancha. / Ilustración: Lauzán
Por Raúl Toledo
Medio en broma y medio en serio, cada vez que va a terminar un campeonato aparece el popular “Hombre del Maletín”. La figura alude al incentivo que reciben algunos equipos para jugarse la vida frente a ciertos rivales, o bien para arreglar partidos, ya sea para obtener un campeonato o simplemente para no perder la categoría o caer en una ingrata liguilla de promoción.
Este fin de semana, los cuatro punteros del campeonato protagonizarán tres encuentros que comienzan a definir el título. Uno de los partidos tocados por la aparición del seudo personaje en cuestión es el de Palestino con Unión Española.
Matías Abelairas, volante de los hispanos, abrió la discusión sobre el uso de incentivos y dijo que “está dentro del juego y no me parece mal (…) Esas son cosas que existen dentro del fútbol y el jugador de Palestino, más allá de un incentivo de la U o de la Católica, tiene el incentivo de jugar contra el puntero”.
Eso no pasó inadvertido en La Cisterna y el capitán de los árabes, Felipe Núñez, contestó que “me parecen desafortunadas las palabras del jugador. Lo único que nos generan sus dichos es una motivación extra para derrotarlos. Ese es nuestro único incentivo”.
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¿Ciencia o ficción, verdad o mentira, realidad o especulación? El experimentado técnico Hernán “Clavito” Godoy aporta su versión: “Siempre ha existido para ganar partidos, pero para perder nunca se ha podido comprobar. Eso sí, a mí me consta que en Indonesia estaban las apuestas clandestinas y me acuerdo que nos pagaban por perder y no sabía por qué. Los saqueos eran enormes. Acá no se ha logrado confirmar que un elenco se deje ganar, pero sí es conocido que existen premios por logro obtenido”.
LLAMADOS Y LUQUITAS
Incentivar o “mojar” a un rival es lo que se escucha en el medio cada vez que se intenta entregar un premio en dinero para que un equipo le gane un partido clave al rival del que ofrece el incentivo.
El Gráfico accedió a un relato que confirma que esta práctica es verídica. La forma de operar es la siguente. Los dirigentes se desmarcan y tratan de contactar al otro equipo a través de un emisario o un jugador que tenga relación de amistad con un integrante del plantel. Se ofrece el dinero y previo llamado se pacta un monto. Se reúne entre 5 a 10 millones de pesos, que posteriormente se reparten los jugadores citados al partido que “sí o sí hay que ganar”. El cuerpo técnico siempre queda fuera y es un acuerdo entre colegas. Eso sí, siempre es por ganar y, según dicen, nunca para jugar para atrás.
“Generalmente esto se hace entre compañeros y es un trato de silencio. Se conversa entre los más experimentados del plantel o los capitanes. Estos se lo cuentan a sus compañeros y si se acepta el monto y se logra el objetivo, es repartido entre los 18 citados en ese partido. Siempre es para ganar un compromiso y es un estímulo, no una coima para perder. En mi caso, el plantel donde estaba recibió 5 millones de pesos y fue en 2012. Se ganó y se repartió entre todos”, dijo un jugador de un elenco de Primera División, que pidió reserva de su nombre y que fue parte de un plantel que recibió incentivos.
Con varios años de circo, el Clavito Godoy agrega que “son contactos para que no aparezca un dirigente o un gerente. Los más amigos dicen que sí le ganan a cierto equipo habrá un emisario que les repartirá lo propuesto. Eso se da acá en Chile”.
OBJETIVO = DINERO
En todos los clubes siempre se conversa sobre los premios y bonos. Muchos de ellos, a principio de temporada, dejan arregladas las condiciones para recibir ingresos extra a fines de mes y en la culminación del torneo. En Primera es el “bono por objetivo”. Los elencos de la Primera B entregan un sueldo base a su equipo y van sumando más emolumentos según el resultado partido a partido.
“La cosa es fácil. Ganan todos o pierden todos. Así se incentivan más por ganar”, dijo un directivo de cuadro del ascenso.
Cobresal, si mantiene la categoría, recibirá 30 millones de pesos que se repartirán entre el plantel. San Marcos de Arica se embolsará una cifra “similar a la que se lleva el ganador del Torneo de Transición”, dicen en el norte sin entregar cifras.
“Es algo netamente para los jugadores, el cuerpo técnico no está considerado en este ítem. La verdad es una cifra millonaria y el monto fue ofrecido por el presidente de la institución. Es utilizado como una motivación extra”, aporta el DT nortino Luis Marcoleta.
Al Clavito Godoy le pasó en 2011 cuando luchó para que Santiago Morning se quedara en Primera. “Ese año con Cobreloa nos jugábamos la categoría. El presidente (Miguel Nasur) ofreció al plantel $60.000.000 y a mí, aparte, me cancelaba 10 millones de pesos por salvar al equipo. La prima era interna y la directiva me dijo eso. Incluso en algunos partidos se les ofreció un monto extra. Eran cifras cuantiosas en un plantel cuya planilla era de 400 millones mensuales”, explicó.
CERO LLAMADO
El Pitu Abelairas hizo la advertencia. Los rivales de Unión Española aclaran que el teléfono no ha sonado. “Nadie nos ha llamado ni nos han ofrecido montos de dinero para ganarle a la Unión. Somos serios, responsables y no nos prestamos para eso”, respondió enfático el referente tetracolor Roberto “Tito” Bishara.
La misma posición tiene Felipe Núñez, arquero y capitán en La Cisterna. “Presumir una situación así es un poco desagradable. No me han llamado y ni siquiera pensaría en algo así, porque sé que es algo prohibido por el reglamento. No doy pie para eso”.
Los partidos que definirán el torneo están identificados. Con el paso de las horas, los WhatsApp, quizá un Inbox de Facebook, un mensaje de texto o un simple llamado puede aparecer. ¿Que pasará el fin de semana? ¿Aparecerá el hombre del maletín?
