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Guillermo Marino en su última conferencia de prensa en el CDA. / Ricardo Ramírez – El Gráfico Chile.
Uno de los jugadores más queridos por la hinchada y más respetados por el plantel azul es Guillermo Marino. El argentino, que llegó en agosto de 2010 cuando Gerardo Pelusso estaba a la cabeza, arribó al Romántico Viajero luego de atravesar uno de los momentos más complicados de su carrera profesional como lo fue estar dos meses inactivo y sin ningún club que por aquel entonces se quisiera hacer de sus servicios.
La U creyó en él y llegó para encantar rápidamente a todos con su humildad y por sobre todo calidad dentro de la cancha. El Guille podrá decir que estuvo presente y fue uno de los artífices de la época más dorada del cuadro estudiantil, puesto que abandona el CDA habiendo obtenido cinco títulos (la Copa Sudamericana, tres torneos nacionales y la reciente Copa Chile) y con el aprecio, respeto y cariño de todo el pueblo azul.
Hoy a las 20 horas frente a Rangers será su despedida con el público a raíz de la reunión que sostuvo el miércoles en la noche con José Yuraszeck y que fue la que selló el adiós del 8 del Chuncho. “Siento tristeza porque termina un ciclo y por dejar el club y todo lo que significa el día a día. Me voy feliz y en paz por todo lo que se ha logrado en estos tres años que conviví en el club, me voy completo en todo sentido… Pertenecer a esta historia de la U a mí realmente me deja muy contento y orgulloso”, aseguró.
El ex Newell’s Old Boys antes de partir también tuvo palabras para su ex jefe, quien ayer por la tarde se reunió con el mandamás laico para determinar los pasos a seguir para la próxima temporada. Marino recalcó que cesarlo en su cargo no ayudaría en nada, “consejo” que al parecer fue recogido por la directiva, que pese a estar dividida acerca de su continuidad, optaría por mantenerlo hasta diciembre.
“Sería perjudicial a mi entender, no veo el motivo de dudar. Los contratos deben respetarse, creo que lo más razonable y beneficioso para el club es que continúe. En mi caso nunca estuvo en duda su permanecía, es mi humilde opinión. A veces es transitar no sólo por el camino del éxito, hay que convivir con derrotas y adversidades porque ahí realmente conoces a las personas… De mi lado presiento que con el tiempo se va plasmando una idea y va a ir dando resultados”.
El ex jugador de Boca Juniors también profundizó acerca de la resolución que lo alejó de la U. “Me hubiese gustado seguir en la U, pero no viene al caso, la realidad es ésta. Valoro la forma en que pasaron las cosas, hablando, como tiene que ser. En mi caso aceptando que son las normas de este juego. Creo que en ese sentido estoy con mucha paz para disfrutar y transitar los últimos momentos del club… Agradezco la paciencia a la gente. Encontré un club donde pude desarrollar mi juego y pudieron entenderlo, cosa que no me había pasado en otras instituciones. Le doy un valor importante porque me pude desarrollar en todo sentido, la U me hizo crecer”, cerró.
El futuro del volante no está en Twitter
Su larga estadía en Universidad de Chile no fue impedimiento para que la hinchada colocolina pidiera la llegada de Guillermo Marino al Monumental. Ayer por la tarde en la red social Twitter varias fueron las voces albas que veían con buenos ojos el arribo del talentoso mediocampista al Cacique, más aún considerando que la partida de muchos jugadores de Colo Colo por bajo rendimiento obligará a Blanco y Negro a requerir del servicio de nuevos elementos para intentar salir del mal momento futbolístico que se ha extendido durante los últimos años en la institución.
Eso sí fue el mismo Marino quien se encargó de echar a tierra esa opción y en principio cualquiera que pudiese aparecer desde el fútbol chileno. “No veo la posibilidad de quedarme en Chile en otro club, el vínculo que creé con la U es muy fuerte y me quiero ir con eso”.
Regresar al otro lado de la cordillera tampoco pareciera ser el futuro del volante, quien el sábado parte a sus vacaciones que no serán en Argentina para retornar el próximo 3 de junio a finiquitar sus cosas en el país. Emiratos Árabes asoma como la posibilidad más cercana, aunque aún no está definido nada.
En tanto, otro que abandona el CDA es el portero Paulo Garcés. La permanencia bajo los tres palos del arco azul por parte de Johnny Herrera obligaron al ex UC a buscar minutos en otro club. Cobreloa y Universidad de Concepción asoman como posibles destinos para un jugador que deja la institución sorprendido por el cariño de la hinchada.
