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Por Pablo Vera O.
“El 2008 Jorge Sampaoli me eligió capitán de O’Higgins”. Esa es la primera frase que Diego Olate suelta al hablar de sus inicios en el fútbol. Acaba de firmar en el Husqvarna, cuadro de la segunda división de Suecia, pero aún recuerda ese hecho como uno de los grandes hitos de su carrera. Se convirtió en uno de los jugadores predilectos del casildense y él le respondió dentro de la cancha con un nivel que lo transformó en uno de los pilares de la oncena rancagüina.
Muy pronto los ojos de los grandes se posaron en él y el 2009 fue traspasado a Colo Colo y ahí todo cambió. Se suponía que ese sería el gran paso en su carrera, el que espera todo futbolista, pero terminó siendo todo lo contrario. “En general yo creo que obtengo números rojos, porque siempre quedé con ganas de mostrar mi ciento por ciento en los equipos en los que estuve. Ya en los últimos tres años sentía que iba de mal en peor. Creo que en un inicio lo hice bastante bien, por lo que ahora sólo espero una segunda oportunidad, hacer un buen trabajo y que los números cambien de color y todo cuadre”, confiesa.
En O’Higgins hiciste buenos torneos, ¿por qué no rendiste en Colo Colo?
Estaba acostumbrado a jugar y ser siempre considerado. En Colo Colo había buenos jugadores y la lucha era difícil, así que creo que tomé una mala decisión y me apresuré. Siempre que alguien hace algo mal queda con gusto a poco y piensa en que puede rendir más. En mi caso me gustaría demostrar que puedo jugar en un grande. ¿Si la gente fue injusta conmigo? Creo que están en todo su derecho.
¿Por qué después de ese paso por Macul no pudiste afirmarte? Incluso descendiste con Ñublense…
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Me hice una imagen de persona conflictiva y la verdad que por ser un jugador que tiene vehemencia y garra piensan que mi idea era andar ofuscado todo el día. Tuve conversaciones con equipos de primera, pero no se llegó nunca a buen puerto. Siempre elegí el jugar por sobre todas las cosas.
Tu último club en Chile fue Copiapó y ahí quedó grabada una fuerte pelea con Samuel Teuber… ¿qué pasó ahí?
Pese a todo eso creo que fue un buen paso por Copiapó, porque me encontreé con una directiva con muy buenas personas. En lo futbolístico tuvimos un año difícil y en un partido ante Santiago Morning nos entrelazamos en dichos y salí expulsado. Cuando los jugadores regresaban a camarines despues del partido, me encuentro con Samuel y le di un golpe en su cara, cuya caída provoco un golpe en el suelo. Al final las consecuencias fueron peores para mí. Después de un tiempo tuve la oportunidad de hablar con él, de demostrarle lo arrepentido que estaba y que el acontecimiento fue totalmente equivocado y evitable.
Su nueva vida en Europa
¿Cómo se gestó tu llegada a Suecia?
Después de saber que tenía que cumplir una sanción por la ley de violencia en los estadios, sólo me quedaba la posibilidad de buscar una opción en el extranjero y con la ayuda de un amigo que tenía un contacto con un agente en Suecia, pude probarme en el Husqvarna FF.
¿Cómo es el fútbol de allá?
El fútbol es totalmente distinto al chileno. Mucho más dinámico y muy fuerte. Requiere de un proceso de adaptación en donde lo físico es fundamental, aunque tampoco dejan lado la técnica. Me ha llamado mucho la atención la intensidad con que se trabaja. Día a día hay que demostrar más, eso me recuerda mucho a los entrenamientos en O’Higgins con Jorge Sampaoli.
Me imagino que ahora tu idea es llegar a un grande de Suecia o de Europa…
Considero que este es un nuevo inicio en el cual pretendo saltar a un equipo de primera división y luego ir paso a paso. Sigo teniendo los mismos objetivos y sueños anteriores. Ser campeón en los lugares que esté y llegar a un equipo grande de Europa. Ando en busca del éxito, quiero volver a ser el mismo que fui en mis mejores tiempos en O’Higgins.
A propósito de O’Higgins, ¿cómo viviste el título del club en el torneo anterior?
Muy feliz, lo celebré con mi novia. La verdad que sentí envidia porque fuimos muchos los jugadores que anduvimos en busca de ese logro, pero a la vez se agradece a los muchachos que lo hicieron posible. Me puso muy contento que se haya podido bajar esa anhelada estrella.
¿Te gustaría regresar y volver a jugar en el club que te formó?
Sueño con esa posibilidad. Ojalá que la gente que vea esta entrevista pueda entender que O’Higgins me dio la posibilidad de obtener y ser todo lo que en estos momentos soy. Por eso, busco la oportunidad de regresar y mostrar las mismas ganas que mostré en cada pelota que disputé en el estadio El Teniente.
