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Luis Rivera Talpén-El Gráfico Chile
Parece una historia de nunca acabar. Luego de los serios incidentes que obligaron a suspender el encuentro entre Santiago Wanderers y Colo Colo por la última fecha del Torneo de Apertura, el partido se ha transformado en todo un dolor de cabeza para la ANFP.
La negativa de las ciudades que fueron apareciendo como opción para recibir el partido complicó la reprogramación del encuentro y las sedes poco a poco se iban cayendo. Si primero fue Talca, La Serena y Rancagua quienes se opusieron a facilitar el estadio, ahora se sumó el CAP de Talcahuano, luego que la Gobernación de Concepción confirmara la negativa.
«Club (Huachipato) no autoriza arriendo de estadio CAP para partido entre Colo Colo y Santiago Wanderers, por lo que no se podrá jugar en Talcahuano», señala el organismo gubernamental en su cuenta de Twitter.
El panorama parecía aún más complejo para la ANFP, ya que Estadio Seguro, a través de un escrito, había prohibido jugar el dilatado partido en la Región Metropolitana y la Región de Valparaíso. Sin embargo, la recién electa directiva comenzó las gestiones con las autoridades para activar nuevamente las descartadas opcioness.
Luego de la reunión con Jorge Sampaoli, parte del nuevo directorio, según informaron desde Quilín a El Gráfico Chile, iniciaron las conversaciones para poder recibir el encuentro en Santiago o Valparaíso, lo que tuvo buena acogida.
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Con este nuevo panorama, Santa Laura y el Elías Figueroa son las nuevas alternativas para programar el partido entre Santiago Wanderers y Colo Colo, que se tendría que disputar este fin de semana y así concluir el Apertura antes del inicio del Clausura, pactado para el próximo 15 de enero.
GRAF/GP
