Aviones, peleas, botellazos y más: Las historias de los últimos Superclásicos

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El Gráfico Chile

El Superclásico del fútbol chileno entre Universidad de Chile y Colo Colo siempre deja algún recuerdo positivo o negativo en alguna de sus ediciones.

El 30 de abril del 2011 en el Estadio Nacional, se disputó un vibrante duelo entre azules y albos quienes se pusieron en ventaja a los 65 minutos gracias al tanto de Ezequiel Miralles, quie festejó de una manera muy particular el tanto. Con su mano, realizó una L de «loser», para burlarse de los hinchas azules. Al final la U ganó por 2-1 con tantos de Gustavo Canales y Diego Rivarola.

El mismo año, pero el 7 de noviembre se disputó un intenso duelo en el Estadio Nacional que terminó igualado 2-2. El partido jugado bajo una intensa lluvia estuvo marcado por el agónico tanto de Colo Colo, convertido por Javier Cámpora, quien estaba en fuera de juego, el cual no fue sancionado, ya que al juez de línea se le cayó el banderín.

El 30 de octubre del 2011 en el Monumental se vivió uno de los Superclásico más recordado de los últimos años. Colo Colo superaba por 2-1 a la U con nueve jugadores, sin embargo en el último minuto de alargue, Osmar Molinas cometió un autogol el cual desató la euforia del entrenador Jorge Sampaoli, quien se lanzó al césped del recinto de Pedreros, festejando el empate como si fuera un triunfo. Además, el volante Marcelo Díaz, realizó el mítico «Pato Yáñez» a la barra azul.

En junio del 2012, se registró una de las mayores goleadas de la U contra el archirrival. El conjunto laico goleó por 4-0 a los albos. Sin embargo, a los 11 minutos del partido, una avioneta sobrevoló el Nacional donde se leía «La Copa grande, no es para equipo chica», en referencia a la Copa Libertadores donde los azules, habían quedado eliminado justamente en la previa del Superclásico.

En octubre del mismo año, la U venía de una gran racha de juego y llegó al Monumental con la ilusión de cortar la racha negativa ante el Cacique en Macul. Sin embargo, un golazo de Carlos Muñoz sepultó la ilusión azul y al final del compromiso se desató una verdadera batahola. El portero Francisco Prieto realizó un «te paseo» a la barra de la U y luego, cuando fue encarado por el portero Johnny Herrera le realizó un gesto obsceno con su mano. Por si fuera poco, camino a camarines, el técnico albo, Omar Labruna gritó a viva voz «te dije we… que la moda se acabó».

El 6 de abril del 2014 se registró un partido tranquilo que ganó Colo Colo por la cuenta mínima gracias al autogol de Roberto Cereceda. No obstante cuando finalizó el duelo se registró uno de los hechos más repudiables del fútbol chileno en los últimos años. El volante del Cacique, Jason Silva festejó junto a la parcialidad alba y pisó una bandera del archirrival. Por aquel cometido, fue detenido con el cargo de Ley de Violencia en los Estadios y pasó una noche en una comisaría.

El mismo 2014, pero en octubre, los albos superaron por 2-0 a la U en el Monumental con tantos de Esteban Paredes y Jean Beausejour. Tras el tanto del Bose, Felipe Flores le gritó el gol en la cara al portero Herrera, quien, después en camarines el golero tildó de «chipamogli», al ariete albo.

Finalmente, el año 2015 en el último Superclásico por torneos nacionales, Colo Col superó por 2-0 a la U en el Monumental y el volante Gonzalo Espinoza, al momento de ser sustituido, lanzó una botella al acrílico que separa la banca de las gradas contra los hinchas albos y fue sancionado por su acto. 

Este domingo a partir de las 12:30 horas se vivirá la versión 179 del Superclásico. ¿Será recordado como los anteriormente mencionados?

GRAF/PMR