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El Gráfico Chile
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Aunque no está confirmado matemáticamente, la realidad indica que Unión La Calera es el primer descendido a Primera B de la temporada 2015-2016 del fútbol chileno. Sólo una utópica combinación de resultados mantendría a los cementeros en la división de honor del fútbol chileno.
Con una fecha por disputarse, el elenco que comanda el uruguayo Leonardo Ramos requiere de una mezcla numérica, que se puede calificar como fantástica, para salvarse, pues debe vencer por un amplio margen a Deportes Iquique en calidad de local y, al mismo tiempo, esperar que San Luis y San Marcos pierdan.
En lo específico, una caída de los canarios como visita ante Deportes Antofagasta le permitiría a los caleranos superarlos en la tablacon un triunfo, ya que harían 29 ante 28 de sus archirrivales. En dicho plano, el asunto pasaría por dar caza a San Marcos y ahí viene lo complicado.
Los de Arica jugarán en casa ante Palestino en la última fecha y sólo una derrota por muy amplio margen de los pupilos de Emiliano Astorga les daría chances de salvación a los de la Quinta Región, siempre y cuando ellos mismos ganen por gran diferencia a Iquique. Se debe recortar una diferencia de gol de 18 tantos entre los dos equipos en cuestión.
Si San Luis y San Marcos caen, y La Calera gana, la parte baja quedaría con los nortinos y los cementeros con 29 y los canarios con 28, y ahí el asunto pasa por la diferencia de gol. En dicho plano, el elenco rojo debe recortar una distancia de 18 goles que tienen con los del Morro, pues hoy registran una diferencia de -26 ante una de -8.
El asunto se complicaría aún más si se combina una caída ariqueña con un empate quillotano, pues ahí los de Leonardo Ramos también deben recortar una extensa diferencia de gol con los quillotanos que en dicho ítem registran un -9.
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Un triunfo de San Marcos o un triunfo de San Luis echaría por tierra todo y confirmaría en las matemáticas un descenso calerano que en la realidad ya se puede dar por hecho.
GRAF/PS
