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El Gráfico Chile
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Algo más que el título, el descenso y la liguilla habrá en disputa en la última fecha del torneo de Clausura. Específicamente para Colo Colo y Universidad Católica, ya que entre estos dos equipos saldrá el rival de la Universidad de Chile para la definición de la Supercopa 2015-2016.
Los azules, vigentes campeones de este certamen tras vencer en la final a la Universidad de Concepción, se ganaron el derecho a participar nuevamente de este certamen a raíz de su título en la Copa Chile 2015, en la que dieron cuenta del Cacique en una vibrante definición que sólo se desniveló vía lanzamientos penales.
El reglamento establece que este certamen que comenzó a jugarse en 2013 debe enfrentar al ganador de la Copa Chile con el campeón de uno de los dos torneos de la temporada que tenga mejor puntaje en la tabla acumulada.
En dicho plano, hoy Colo Colo está logrando dicha clasificación gracias a su título en el Apertura 2015-2016 y sus 58 puntos (+17 de diferencia de gol) que registra en la tabla acumulada.
El único equipo que puede frustrar la clasificación alba es Universidad Católica. Si los cruzados logran quedarse con la corona del Clausura 2015-2016, tendrían virtualmente asegurada su participación en la Supercopa.
Un triunfo cruzado en la última fecha les permitiría a los de Mario Salas llegar a 61 puntos en la tabla anual, los mismos que podría alcanzar el elenco de José Luis Sierra, sin embargo la diferencia de +25 de los estudiantiles desnivelaría las cosas en favor de ellos, a menos que Colo Colo derrote por un margen muy amplio a Santiago Wanderers en Macul.
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¿Qué pasa con O’Higgins? El principal candidato a obtener el Clausura no puede conseguir un pasaje a la Supercopa, ya que sus 51 unidades en la general acumulada le imposibilitan alcanzar los 58 que, a la fecha, tienen la UC y el Cacique. Un título celeste clasificaría automáticamente a los de Pedrero al certamen que se debería disputar el próximo 17 de julio, en un recinto por definir.
GRAF/PS