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El Gráfico Chile
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El caso de Roberto Rojas pasó de ser una preocupación del mundo del fútbol a un verdadero motivo de estudio para la ciencia en Brasil, donde el ídolo chileno se tuvo que operar de una particular aflicción a sus pulmones.
Según un reportaje de UOL, el Cóndor, que ha tenido una complicada recuperación de una Hepatitis C tras el transplante de higado que conmovió a Chile, ahora enfenta una nueva enfermedad que los científicos están estudiando por su singularidad.
Fue la última semana, cuando Rojas sufrió una «increíble dificultad para respirar, a pesar que el ex arquero nunca ha fumado». Al notar que el dolor pasaba de lo normal, se puso en manos de los especialistas en Sao Paulo, quienes soprendidos evaluaron una «doble torsión en los pulmones».
En Brasil no podían creer lo que le pasaba a Rojas: «Lo primero que hicimos fue documentarnos bien y ver si alguien había visto algo parecido. Nadie lo había hecho. Es un caso rarísimo en la medicina, tanto que nos tomó una semana la decisión final. Finalmente las imágenes y el cuadro clínico no dejaban espacio para dudas», comentó el doctor Eduardo Werebe, especialista en el área que llevó a cabo la exitosa operación que extirpo un tercio del pulmón.
La dura semana del ex arquero de la selección chilena fue relatada por el propio Cóndor, quien emocionado contó que cuando se vio rodeado de sondas pensó en morir: «Cerré los ojos y hablé con Dios: ven, ya no quiero más».
En ese momento, Rojas recibió todo el apoyo de su mujer, Viviane, y del médico Luiz Gustavo Díaz: «Lo tomé del brazo y le dije: confía en mí, mañana esto habrá pasado». Al otro día la promesa se había consumado y el ídolo de Colo Colo ya se sentía mejor.
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La particular intervención por la torsión de pulmón habría sido provocada por la acumulación de agua entre el pulmón y la caja torácica, además de las innumerables punciones que fue sometido para sacarle este líquido.
Ahora, Roberto Rojas se transformó en objeto de estudio de la ciencia en Brasil y su caso ya está en revistas del tema. El Cóndor, en su casa, ya planea volver a trabajar y seguir su lucha por mejorar de las enfermedades que lo aquejan.
GRAF/JR
