Notable: Diario argentino celebró los 30 años de la Mano de Dios con relato “en vivo”

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Círculo Central

Corría 1986 y la sombra de la Guerra de las Malvinas aún rondaba en Argentina e Inglaterra. Pese a que habían pasado cuatro años del conflicto bélico donde los argentinos intentaron recuperar la soberanía de aquel patagónico terreno, que en ese entonces y hasta la actualidad es explotada por Gran Bretaña, la cruenta guerra, que terminó con la vida de 649 militares argentinos, no era fácil de olvidar. 

Por eso, cuando a Argentina e Inglaterra les tocó enfrentarse cuatro años después de aquel conflicto por los cuartos de final del Mundial de México 1986, muchos lo consideraron una revancha y una «segunda Guerra de las Islas Malvinas». Aunque muchos quisieron quitarle ese peso político por el temor a los enfrentamientos entre los barra brava argentinos y los hooligans ingleses, el ambiente de tensión que había en tierras aztecas se sentía a kilómetros. 

Con esos antecedentes, sudamericanos y europeos salieron a la cancha del Estadio Azteca para enfrentarse ante los 114 mil espectadores que habían repletado el recinto. Y Argentina tenía su propio comandante para ganar esta «guerra»: Diego Maradona. 

El que es considerado el mejor jugador del mundo había guiado al equipo de Carlos Bilardo hasta la ronda de los ocho mejores y parecía destinado a ser el encargado de cobrarse revancha por todos aquellos soldados que habían fallecido en 1982. Como era de esperar, el Pelusa no decepcionó y dejó a los ingleses en el piso. 

Un gol con la mano fue el inicio del ataque argentino contra Inglaterra. Cuando se jugaban 51 minutos, Diego Maradona inició una gran jugada, tocó para Jorge Valdano y el despeje inglés salió en dirección a su arco. Fue ahí cuando el 10 argentino se «avivó» y estiró su brazo izquierdo para adelantarse a la salida de Peter Shilton y convertir el tanto con la mano. 

«¡Para mí el gol fue con la mano. Lo grito con el alma, pero tengo que decirles lo que pienso…!», relataba en ese entonces el argentino Víctor Hugo Morales sobre el gol que recién había convertido Diego Maradona. Y si hasta los trasandinos reconocían la «trampa» del Pelusa, las protestas de los ingleses fueron más que airadas. Nada de eso le importó al árbitro Ali Bennaceur y validó el tanto. Argentina iniciaba su revancha con un gol que no era legítimo. 

Los ingleses sintieron el golpe de aquel viciado gol de Diego Maradona, quien les daría el golpe de gracia cuatro minutos más tarde. El Pelusa, que luego bautizaría su cuestiondo tanto como la «mano de Dios», no quería dejar dudas sobre su talento y en el minuto 55 hizo que todo el Estadio Azteca lo aplauda de pie.

El 10 trasandino tomó un balón en la mitad de cancha y empezó a dejar jugadores de Inglaterra en el camino, para luego entrar al área, eludir al arquero y definir cuando casi estaba cayendo. Un gol que fue ovacionado y que Víctor Hugo Morales relató con el corazón para terminar bautizando a su ídolo como «Barrillete Cósmico».

«Quiero llorar. Dios santo, viva el fútbol (…) Es para llorar, perdónenme. Maradona en recorrida memorable, en una jugada de todos los tiempos. Barrilete cósmico ¿De qué planeta viniste?», exclamaba un emocionado relator argentino, a quien no le importaría nada el descuento de Gary Lineker sobre el final, sobre el que luego sería llamado el «gol del siglo XX». Argentina tuvo su revancha y venció por 2 a 1 a Inglaterra para clasificar a las semifinales de un mundial que terminarían ganando. 

A 30 años de aquel histórico partido, los homenajes a Diego Maradona no se hicieron esperar. De todo el mundo recordaron la «mano de Dios» y «el gol del Siglo XX» y muchos dieron su opinión sobre esa gran jugada que coronó la carrera del argentino. 

«Es uno de los goles más bonitos de todos los tiempos. Estaba presionado por dos jugadores, consiguió seguir y eludirlos. Hay que tener intuición, instinto, habilidad y coraje, porque tomar la pelota en el medio campo y lanzarse al ataque con tantos defensores marcando es un acto de coraje», señaló a la página de la FIFA, por ejemplo, el «Fenómeno» Ronaldo para recordar la mítica corrida de «Barrillete Cósmico».

Pero uno de los mejores homenajes que le rindieron vino desde el diario argentino La Nación. Aprovechando la tecnología de esta época, el medio trasandino, a través de su sección deportiva Canchallena, hizo un relato «en vivo» a través de Twitter, tal como se transmite por estos días cualquier partido. Posteando videos y fotografías, revivieron el histórico encuentro como si se estuviera jugando en 2016. Un culto digno de rendir.