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AFP
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El tenista español Marcel Granollers y el uruguayo Pablo Cuevas, pareja de dobles en el torneo de Wimbledon, podrían ser multados por su reacción cuando la juez de silla le negó permiso al segundo para ir al baño.
La pareja perdió el lunes por 6-3, 4-6, 6-4, 3-6 y 14-12 ante la formada por el británico Jonny Marray y el canadiense Adil Shamasdin, pero el resultado se vio eclipsado por la polémica.
Primero, Cuevas, de 30 años, recibió una advertencia cuando amenazó con orinar en una lata de bolas en respuesta a la negativa de la juez de silla, la francesa Aurelie Tourte. Un hecho que fue confirmado por el diario The Guardian, aunque los jugadores lo negaron.
La pareja recibió una segunda advertencia y fue castigada con la pérdida de un punto cuando Cuevas lanzó un pelotazo fuera de la cancha.
Cuevas y Granollers se negaron entonces a seguir jugando el partido, que perdían por 12-13 en el quinto set y 0-40 para sus rivales, que disponían de tres bolas de partido.
Tras diez minutos, y la intervención del supervisor del torneo, reanudaron el partido, que concluyó inmediatamente con un mal servicio de la pareja enfurecida y la victoria de Marray y Shamasdin.
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Según The Guardian, Granollers siguió entonces gritando a la juez, que se retiró acompañada por un miembro de seguridad.
«Fui dos veces al baño durante el partido, y el quinto set fue muy largo. Creo que se debería permitir una ida adicional si el partido se alarga a cinco sets», dijo Cuevas.
GRAF/FLB
