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Por Pedro Marín Roldán, enviado especial a Osorno
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La cuarta fecha del RallyMobil que se disputará en Osorno estuvo a punto de perder a dos competidores antes de comenzar la competencia.
Esto porque el equipo Rudel tuvo problemas aduaneros para retirar sus Ford Fiesta R2 y sobre la hora lograron superar el inconveniente y obtuvieron el permiso para retirar los autos desde la Aduana en Talcahuano.
Al ser autos de carreras, el Seremi de Transporte solicita el permiso como tal y por lo mismo, el equipo Rudel había solicitado un permiso provisorio para la «internalización» de los vehículos en el país.
Dicho permiso venció en su fecha y los Ford Fiesta T debieron regresar a la Aduana hasta conseguir el permiso final. Dicho documento fue llevado tres veces y en algo inexplicable se extravió.
Cuando todo indicaba que no iban a correr en la fecha de Osorno, llegó la alegría. Desde Valparaíso autorizaron el retiro de los autos y un funcionario de la Aduana de Talcahuano debió abrir el galpón donde se encontraban los bólidos para que fueran retiraros.
La alegría en el equipo no se hizo esperar. Rodrigo Ruiz de Loyzaga expresó que «se logró algo que parecía imposible. Hubo una muy buena disposición y amabilidad de todos, en especial, de la gente de la productora y también de los comisionarios de la Comisión Nacional de Rally, ya que sin la gestión de ellos, no habríamos podido conseguir todo esto».
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Mientras que su hijo, Joaquín Ruiz de Loyzaga quien se encuentra disputando los primeros puestos en la categoría R2 indicó que «la vimos difícil, porque las gestiones que se debían realizar escapaban de nuestras capacidades. Lo bueno es que los autos están listos para correr, por lo que esperamos tener un buen fin de semana pese a todas las complicaciones».
Con esto, ambos competidores podrán decir presentes en la cuarta fecha del evento tuerca más importante del país.
GRAF/AG