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Por Pedro Marín Roldán
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El parte médico emitido por Colo Colo tras la grave lesión que sufrió Michael Ríos y que fue operado con éxito el lunes fue claro: «ruptura total del tendón de Aquiles de la pierna izquierda y tiene un tiempo de para de cuatro a seis meses».
Sin embargo, dicha recuperación se puede prolongar por más tiempo y por lo mismo, en la dirigencia de Blanco y Negro estudian la opción de desafectar al volante. De esta manera, podrían sumar un cuarto refuerzo para el primer semestre del próximo año, cuando sólo está permitido sumar tres jugadores.
Los estatutos de la ANFP indican que los clubes pueden reemplazar a un jugador que sufra una lesión grave y que deben comprobarlo en la sede de Quilín.
En Colo Colo están al tanto de está situación y dentro de esta semana tomarán una decisión sobre el tema donde la palabra del entrenador Pablo Guede será clave para la decisión final.
Ríos se perderá el primer semestre por la lesión y si los albos no lo inscriben para ninguna competencia podrían sumar un cupo más para reforzar por la lesión.
Pese a que el parte médico indica que son entre cuatro a seis meses de recuperación, al interior del cuerpo médico no descartan que sea más prolongado el período, ya que tienen como antecedente a Charles Aránguiz quien tardó siete meses en volver a un terreno de juego.
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Por lo mismo, la dirigencia de ByN ya tomó cartas en el asunto y esperarán la decisión de Guede para definir la situación de Ríos.
GRAF/PMR
