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Por Diego Espinoza Chacoff
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El técnico Ángel Guillermo Hoyos fue confirmado el pasado lunes como el nuevo entrenador de la Universidad de Chile por Azul Azul (ver nota anexa), y este martes arribará a Santiago para incorporarse a los trabajos de los laicos en el Centro Deportivo Azul.
Aunque la decisión estaba tomada hace semanas por el presidente Carlos Heller, el mandamás de la concesionaria quiso analizar más opciones que, finalmente, de todas formas terminaron decantando en el DT argentino de 53 años.
Definido como un hombre «con mucho ímpetu», «motivador» y «muy religioso», el adiestrador rosarino vendrá a Chile sin su ayudante de campo Luis Montellanos, quien fue su mano derecha desde que arribó al Bolívar en 2011.
A pesar de separarse de Hoyos con esta aventura que comenzará en la U, Montellanos elogió largamente al nuevo entrenador azul, destacando lo cercano que es con los jugadores, su intensidad en el fútbol, además de su fanatismo religioso.
«Guillermo comparte mucho con el plantel donde está, con el equipo de trabajo comparte mucho también, haciendo de todo, motivándolos hasta la muerte y la verdad es que esa cercanía ayuda a muchas cosas porque eso para él es lo fundamental para poder querer ser campeón», señaló Montellanos a El Gráfico Chile.
«En el fútbol a le gusta mucho la intensidad, tener un fútbol muy rápido y también la posesión del balón. Esto lo modifica según lo que diga el otro equipo para quitar el balón también. ¿Pero igual se defiende bien? Claro es que hay planificación que se ve porque el otro equipo juega también», añadió su ahora ex ayudante de 49 años.
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Sin embargo, aunque el fútbol es muy importante para el ex DT de Oriente Petrolero, la religión también juega un papel fundamental dentro de su vida, intentando traspasar toda su fe al campo de juego, según explica Montellanos.
«Él no tiene mucha religiosidad sólo para enfrentar los diferentes partidos que enfrenta, es su forma de vida, lo vive día a día, y es que él tiene mucha fe. Él cree mucho en la Virgen y confía en ella, él usa toda su fe y religiosidad para enfrentar todos los días», apuntó.
El ímpetu y los resultadosSu forma de juego intensa fue lo que terminó convenciendo a Heller, quien seguía el trabajo de Hoyos desde hace años. A pesar de sólo ganar un título con Bolívar, en la selección de Bolivia confiaron en él para sacar resultados como el 0-0 frente a Chile, con un ímpetu único en el medio.
«Conversé con él un poco cuando él asumíaa como DT de la selección, nos saludamos y todo y fue bueno. Vi en él, el deseo y el ímpetu que se necesitaba, y que podía ayudar a que el fútbol boliviano pueda mejorar a nivel de la selección», compartió Ronald Rivero con El Gráfico Chile, ex dirigido por Hoyos y encargado de las series menores de Bolivia en Sucre.
«Creo que la selección ha estado buscando un cambio de consolidar el tema de los resultados y por eso contó con él. Lo que si, Hoyos se encontró con un proceso de transición donde no tuvo mucha suerte. En Bolivia se está tratando de reforzar el trabajo para menores, pero el tiempo es corto y tampoco pudo planificar mucho. Seguramente allá podrá tener mayor tranquilidad para trabajar», sentenció Rivero.
GRAF/DE
