Llega el día de la verdad para la Roja del balonmano. Tras tres derrotas consecutivas, ante Alemania, Hungría y Croacia, potencias de la especialidad, la selección chilena enfrenta este viernes, desde las 10:00 horas, a Arabia Saudita.
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De vencer, el conjunto dirigido por el español Mateo Garralda seguirá haciendo historia en el Mundial de Francia. Ya sumó un inédito triunfo en un certamen planetario, en el estreno contra Bielorrusia, pero de superar a los árabes asegurará un lugar entre los 16 mejores.
“Estaremos satisfechos sólo si pasamos a octavos, antes que eso, no”, avisa en la previa, en conversación con El Gráfico Chile, Emil Feuchtmann, una de las figuras del combinado criollo, quien advierte que las tres caídas al hilo no han mermado la confianza del grupo. “Teníamos el objetivo de ganar dos partidos y aún está intacto”, complementa.
“Llegamos al partido concentrados y confiados en que si hacemos las cosas bien tácticamente, podemos ganarlo”, agrega el jugador del Wacker Thun suizo, que le resta importancia a la ansiedad: “Si seguimos el guión, pasará a un segundo plano”.
En cuanto al rival, el hermano de Erwin y Harald, también integrantes del plantel, muestra su respeto. “Es un equipo peligroso, que juega muy bien en el uno contra uno, pero vamos sin miedo”, cierra.
GRAF/CS
