Con la presencia de un centenar de hinchas, Chapecoense entrenó por primera vez desde el accidente en el Arena Condá, en la previa del encuentro amistoso que jugarán ante Palmeiras el próximo sábado 21 de enero.
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La tragedia ocurrida el 28 de noviembre de 2016 terminó con la vida de 71 personas, entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes del equipo brasileño, además de periodistas y tripulación, lo que obligó al club de Chapecó a reformar desde la base un nuevo plantel para enfrentar la temporada de 2017, que tendrá que afrontar la Copa Libertadores, la Serie A brasileña, la Copa de Brasil, el Campeonato Catarinense, la Primera Liga, la Recopa Sudamericana y la Copa Suruga.
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Han llegado 17 jugadores en calidad de cedido al club de Santa Catarina y el resto del equipo se conforma con los jugadores que no viajaron a Medellín para la final de la Copa Sudamericana y futbolistas de las divisiones inferiores del enlutado club.
Alan Ruschel, uno de los tres futbolistas sobrevivientes de la tragedia, estuvo presente en la jornada de práctica en el Arena Condá y se vistió con el uniforme de entrenamiento como el resto de los jugadores que están disponibles para el amistoso ante Palmeiras.
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