A más de cuatro años de los Juegos Olímpicos de Tokio, la ciudad nipona comenzó con la recolección de material electrónico y desecho de aparatos digitales para la fabricación de las 5 mil medallas que se entregarán en la cita.
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El comité organizador anunció que se requirirán ocho toneladas de metal para manufacturar las preseas. Las autoridades explicaron que se aceptaran nueve tipos de dispositivos digitales pequeños, incluidos smartphones, cámaras digitales y reproductores portátiles.
Asímismo, los organizadores hicieron un llamado a la población a donar dispositivos “descartados y obsoletos”. En el anuncio, celebrado en la capital japonesa, la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, calificó el proyecto como un intento de explotar una mina urbana, que comenzará su trabajo a partir de abril, con la recolección del material que estará a cargo de NTT Docomo, el principal consorcio de telecomunicaciones del país.