Decir que los equipos chilenos ya no le ganan a nadie con la camiseta y que los venezolanos ya no son la “cenicienta” de Sudamérica ya parece una obviedad. Sin embargo, Palestino es el único que ha salvado el orgullo criollo en los torneos continentales del último tiempo, por lo que asomaba como amplio favorito para el duelo en el estadio Nacional ante Atlético Venezuela, por la ida de la primera fase de la Copa Sudamericana.
Pero en la fracción inicial no fue así, ya que el cuadro “llanero” se generó las mejores opciones para anotar. No obstante, entre Darío Melo y la falta de finiquito de los delanteros forasteros permitieron que los primeros 45 minutos terminaran sin goles.
Los árabes, poco y nada, con apenas unos tibios intentos de Leonardo Valencia. Nicolás Córdova debió irse muy preocupado al descanso.
Desesperación árabe
Y la inquietud del “Nico” fue aún mayor a los 64’, cuando luego de un desborde de Anthony Graterol por la izquierda, Jonathan Herrera definió ante un indefenso Melo para poner el 1-0. De inmediato, Córdova mandó a la cancha a Diego Torres y Jonathan Cisternas, en reemplazo de Fabián Carmona y Renato César, mientras que unos minutos después, el lesionado Roberto Cereceda tuvo que darle paso al debutante Nicolás Astete.
Con todas las fichas arriba de la mesa, el “Tino” se fue encima del arco del elenco adiestrado por Ignacio González, otrora arquero de Unión Española. Y a los 79’, el recién ingresado Cisternas casi lo empata, pero el golero Jesús Briceño ahogó el grito de gol de los tetracolores sobre la línea de sentencia.
Más allá de esa chance, no hubo oportunidades tan claras para el cuadro de colonia, que se topó con una zaga “llanera” bien parada para resistir los embates. Así se esfumó el tiempo en el coliseo ñuñoíno.
Palestino tendrá que ir a buscar su clasificación a Caracas, donde deberá anotar por lo menos un tanto para aspirar a los penales y dos para avanzar de forma directa. Una vez más, los equipos chilenos demuestran que el continente les está quedando grande.