A casi cien días de la tragedia aérea que conmovió al mundo el pasado 28 de noviembre cuando la mayoría del plantel del Chapecoense perdió la vida luego de que su avión se estrellara en Colombia mientras se dirigían a Medellín a disputar la final de la Copa Sudamericana, el conjunto brasileño realizó su primer viaje internacional para debutar en la Copa Libertadores ante Zulia en Maracaibo.
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Tras aterrizar sin novedades en Venezuela la madrugada de este lunes, y con una plantilla totalmente nueva, el Chapecó se mostró ilusionado en lograr un buen resultado en tierras llaneras. «Tenemos muchas ambiciones. Vamos a tratar de llegar lo más lejos posible», declaró una de las caras nuevas, el delantero Tulio De Melo, de 34 años.
«Sabemos que los ojos del mundo van a estar puestos en este partido y que todos van a estar ligando por Chapecoense. Pasó lo que pasó y va a ser un encuentro con una altísima carga emotiva», dijo Daniel Farías, entrenador del Zulia FC.
Chapecoense aterrizó en Maracaibo, con la presencia de algunos hinchas en el aeropuerto, tras un maratónico viaje de 26 horas en vuelo comercial, con escalas en Sao Paulo y Ciudad de Panamá.
Los de Chapecó comparten el Grupo 7 con el Zulia FC, Lanús y Nacional de Uruguay.