Un clásico del fútbol se suele jugar con pierna fuerte, pero el de Irlanda con Gales, disputado este viernes y que terminó en empate sin goles, excedió los límites y dejó una dura lesión. Cuando se jugaban 72 minutos de partido, Neil Taylor le cometió una fuerte entrada a Seamus Coleman, quien sufrió una fractura de tibia y peroné que lo tendrá alejado de las canchas por meses.
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Pero no fue la única dura infracción que se vio en el clásico y la otra la protagonizó Gareth Bale. El jugador del Real Madrid llegó tarde a un cruce y terminó haciéndole una fuerte falta a John O’Shea que fue sancionada con tarjeta amarilla, cuando se jugaban 68 minutos.
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Por eso, el irlandés no quedó nada contento con la infracción del galés y salió a criticarlo por su actitud. «No hay problema en que te hagan una entrada dura, pero cuando es porque llegas tarde es una historia diferente«, comenzó diciendo O’Shea.
«Cuando vi la jugada repetida estaba un poco molesto. Recibí un montón de patadas, pero la verdad es que tuve suerte teniendo en cuenta lo que le ha sucedido a Seamus (Coleman). Pudieron haber sido perfectamente dos rojas. En un clásico sabes que vas a recibir, pero, como he dicho, dentro de lo razonable. No me acuerdo cuantos puntos de sutura necesité y el médico tuvo que coser algunos en profundidad y otros en la parte superior. Esperemos que se cure rápidamente», concluyó John O’Shea sobre la temeraria acción de Gareth Bale.