Aunque es sólo un número en la camiseta, los dorsales son una tradición en el fútbol y bien lo saben los que llevan el diez en la espalda, sinónimo del jugador creativo de la cancha. Pero ese «respeto» se perdió por parte de un equipo brasileño que creó una innovadora forma de hacer marketing y conseguir auspiciadores.
PUBLICIDAD
Fluminense de Feiras, un cuadro de la Serie D de Brasil, aprovechó que jugaba por el torneo baiano ante el Vitoria y encontró cómo hacer más dinero: vendió sus números. Además del clásico dorsal, el conjunto brasileño le agregó el signo de real (moneda del país), un decimal y el precio de un producto, con lo que promocionaron las ofertas del supermercado que los auspicia.
Así fue como el 10 se transformó en 10,98 para reflejar el valor de la pizza en 2×1, mientras que el 7 estaba destinado para las sardinas, el 20 para la espuma de afeitar y el 9 para una toalla de baño, por sólo nombrar alguno de los productos. La medida fue muy valorada por el club, que promocionó en su Facebook todos los lados donde publicaron su iniciativa, la que no fue nada de bien vista por los hinchas.
0 of 5