Real Madrid se hizo fuerte en los minutos finales ante Bayern Munich y con un claro 4-2, que se construyó tras la expulsión de Arturo Vidal, el conjunto merengue logró la clasificación a semifinales de la Champions League.
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De entrada, el juez húngaro Viktor Kassai no tuvo piedad en mostrarle tarjeta amarilla a Arturo Vidal luego de una fuerte entrada en contra de Isco cerca del área, la que, a la postre, sería fundamental en el transcurso del partido. En cuánto a juego, en el primer lapso Bayern Munich intentó tomar el control del balón y a momentos logró complicar al Madrid con centros desde las bandas que buscaron la cabeza de Robert Lewandowski, pero la defensa merengue respondió.
Si bien fue el equipo de Zinedine Zidane quien intentó con más remates al arco en el primer tiempo, el desarrollo del juego estuvo equilibrado y de dientes apretados.
Fue en la parte complementaria donde el partido tomó vuelo. Bayern propuso más y así fue como en el arranque llegó a la apertura de la cuenta, cuando Robert Lewandowski, vía lanzamiento penal, puso el 1-0 (53’) tras una falta de Casemiro contra Arjen Robben dentro del área.
Los alemanes se fueron en busca del segundo, pero carecieron de finiquito y esto el Madrid lo aprovechó para quitarle el manejo del balón a la visita. A los 76’, llegaría la paridad cuando Casemiro envió un centro bombeado al área que Cristiano Ronaldo no tuvo problemas para conectar de cabeza y dejar las cosas 1-1, lo que hacía difícil la hazaña del equipo de Arturo Vidal. Pero la respuesta llegaría rápido y el 2 a 1 de los bávaros se estructuró dos minutos después del empate, cuando una desinteligencia en la defensa merengue terminó con Sergio Ramos enviando el balón en su propio arco.
A los 83’ el partido daría un giro radical. El juez le mostró la segunda amarilla a Arturo Vidal tras una supuesta infracción contra Marcos Asensio, sin embargo la repetición dejó en claro que el chileno tocó el balón en primer lugar.
A partir de ahí el Bayern perdió el control del juego y eso el Madrid lo aprovechó. Ya en tiempo extra (104’), y para mayor polémica, llegó el gol de la clasificación merengue en los pies de Cristiano Ronaldo, quien, en clara posición fuera de juego, bajó el balón de pecho y lo acomoda para batir la portería de Neuer.
El Real Madrid no desaprovechó la superioridad numérica, y a los 110’ desequilibró el marcador con otro gol de Cristiano Ronaldo que incluyó un jugadón de Marcelo. La guinda de la torta y el 4-2 final llegaría a los 112’, luego de una gran jugada personal Marcos Asensio. El árbitro y CR7 tumbaron el sueño de Arturo Vidal de ganar la Champions League.