«Él (Mbappé) nació en 1998 ¿cierto? En ese momento ya había sido parte de la selección nacional en Francia 1998. Eso es lo más bonito de jugar tanto tiempo, juegas con tipos que ni siquiera habían nacido cuando uno ya tenía una carrera en el fútbol. Yo conecté casi tres generaciones, jugaba con futbolistas de los 50s y 60s y ahora termino jugando con jugadores que nacieron después del 2000″.
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La declaración de Gianluigi Buffon daba cuenta de la situación precisa que se vivía en la semifinal de Champions entre Juventus y Mónaco. Es que mientras la Vecchia Signora apelaba a la experiencia de sus jugadores, comandados por los 39 años de su capitán Gigi, y la solidez defensiva, los franceses tenían como gran arma la juventud y la capacidad goleadora de su plantel reflejada en la joven promesa Kylian Mbappé, de sólo 18 años.
Finalmente, la experiencia se impuso a la juventud. Los italianos fueron los ganadores del partido de ida jugado en el St.Louis II de Mónaco, donde se impusieron de visita por 2 a 0. Precisamente, además de Gonzalo Higuaín, una de las grandes figuras del encuentro fue Buffon, quien se lució bajo los tres palos para mantener una vez más su arco en cero, la novena ocasión en la presente temporada de la Champions League.
Con esta nueva canasta limpia, Gigi ya suma 47 partidos, de los 149 que ha jugado, sin recibir goles en el torneo continental e igualó el registro de Petr Cech, siendo, ahora, solamente superado por Edwin van der Sar (50) e Iker Casillas (54). La leyenda del histórico arquero sigue creciendo y podría sumarle aún más encuentros en la presente edición de la Champions League, ya que aún le queda la semifinal de vuelta y una posible final. A todo eso hay que sumarle los partidos de la próxima Orejona, los que probablemente jugará.
