El pasado miércoles, el plantel de Palestino se llenó de gloria en la Copa Sudamericana tras eliminar por penales a Atlético Venezuela, tras ganar por 1-0 e igualar la serie de primera fase para luego llevarse la victori mediante lanzamientos penales por 7-6.
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A pesar de la felicidad que se vivía en la cancha por el resultado obtenido, el equipo árabe tuvo una medida celebración debido al complicado momento que vive el pueblo venezolano, inmerso en una crisis que tiene en tensión al país con protestas reiteradas contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Ante ese escenario, la dirigencia tetracolor tomó todos los resguardos para asegurar la seguridad del plantel árabe una vez que arribaran a Caracas, capital venezolana.
«Cuando llegamos a Venezuela, los encargados de la seguridad nos dijeron que después de las 18:00 horas era mejor que nadie saliera del hotel por seguridad. Vi que están complicados, es muy difícil estar allá«, comienza explicando el capitán de Palestino, Agustín Farías a El Gráfico Chile.
Debido a la fuerte inflación que sufre el país, los productos básicos para vivir se han hecho cada vez más escasos. Ante eso, el pueblo se volcó a las calles para demostrar su descontento a través de diversas protestas, marchas y manifestaciones que día a día cobran nuevas víctimas debido a la represión policial.
«No tuvimos problemas ni en el hotel ni en el estadio porque la dirigencia del club se preocupó de esas cosas, pero efectivamente en los traslados que tuvimos por la ciudad vimos gente que hacía largas filas para tratar de conseguir cosas básicas para alimentarse. Una pena«, manifestó el portero árabe, Ignacio González.
En esa línea, Farías contó que incluso tuvieron que cambiar la planificación el día del partido debido a los posibles manifestaciones en las inmediaciones del hotel en el que hospedaban en la capital venezolana.
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«Nos hicieron salir tres horas antes porque supuestamente se iban a armar algunas protestas. En camino al estadio vimos policías en las calles que se estaban preparando para enfrentar a los manifestantes«, revela el argentino.
A pesar del poco tiempo que estuvieron en Caracas, los jugadores vivieron en carne propia el miedo que se siente en las calles de la ciudad, un hecho que es ratificado por el trasandino.
«Es complicado ponerse en el lugar de los jugadores que viven día a día este tipo de problemas. También es difícil para nosotros quienes viajamos, porque nuestras familias se preocuparon mucho. En Argentina pasó algo similar en 2001, pero creo que lo de Venezuela es mucho peor«, aseguró.
Con la felicidad por obtener la clasificación y el dolor por ver en vivo y en directo las penumbras que pasa el pueblo venezolano, el plantel árabe abandonó el país para enfocarse en lo que resta del torneo nacional.
Y hoy domingo a las 12:00 horas, enfrentarán a Deportes Temuco en el Estadio Germán Becker, para terminar un semestre negro en el Torneo de Clauusra.
