A pesar de que recién este lunes asumirá en la banca de Santiago Wanderers, la llegada del técnico Nicolás Córdova está revolucionando el puerto. La dirigencia caturra sabe que el estratega nacional no aceptará un presupuesto austero como sí lo hicieron Alfredo Arias y Eduardo Espinel por lo que confirmaron que habrá un aumento en el presupuesto para así conformar el plantel del segundo semestre.
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«Desde el punto de vista institucional entiendo que el presupuesto va a crecer con la llegada de Córdova, esto implica una apuesta más arriesgada respecto de lo que se estaba haciendo esta temporada. Claramente se está dando un paso distinto al del semestre pasado respecto a la política de austeridad absoluta. Además que es comprensible, no creo que un técnico como Córdova acepte las condiciones que aceptó Espinel, que aguantó que le trajeran a cualquier jugador y él veía cómo se las arreglaba», sostuvo Gonzalo Serrano, directivo de Wanderers.
De acuerdo a la información del diatio El Mercurio de Valparaíso, el arribo de Córdova permitiría «solucionar» dos problemas que actualmente tiene la dirigencia: la renovación de Gabriel Castellón y las negociaciones con el defensa de Palestino Ezequiel Luna. «Yo creo que por sentido común, la llegada de Córdova podría allanar el camino para que se quede Castellón, porque tienen el mismo representante (Fernando Felicevich). Todos queremos que Castellón se quede», sostuvo, Serrano.
Con respecto a la llegada de Ezequiel Luna, el directivo sotiene que «el retorno del jugador podría restablecer las confianzas entre los hinchas y la sociedad anónima». Pero las cosas no serán fáciles puesto que a pesar del pasado caturro del defensa, el argentino recibió hace algunos días el llamado de Martín Palermo para incorporarlo la próxima temporada a Unión Española.