El nexo entre la hinchada de la Universidad de Chile y el equipo universitario es una de las variantes más importantes que destacan los futbolistas que alguna vez han vestido esa camiseta, en los 90 años de historia que está próximo a cumplir el club.
Una ligazón que varía de jugador a jugador, y que tiene una especial distinción por las alegrías dadas al equipo según goles convertidos, las ganas que se ponen en la cancha a la hora de disputar un balón, o también por un título conseguido.
Ante eso, diferentes protagonistas de los títulos de la U en su historia confesaron a El Gráfico Chile cuál es su sensación al coronarse campeón con los azules, enfocándose en la desemejanza que se tiene con otros equipos.
«El salir campeón en la U tiene un sabor especial. Los que salimos campeones somos unos privilegiados porque tuvimos esa oportunidad. Es una conexión con los hinchas y una satisfacción de decir que cumplimos el objetivo que siempre se busca de lograr el título, es un poco de no tener más responsabilidad porque ya lo lograste» contó el ex goleador Diego Rivarola.
En esa misma línea, el ex lateral azul Mauricio Aros se sumó a la teoría de Rivarola. «Salir campeón es lo mejor y a mi me tocó ganar una copa europea, pero lo que significó ser campeón con la U fue lo más importante que me ha pasado en la carrera, no tiene comparación, la gente, el entorno, jugar con 80 mil personas en el estadio antiguo, era maravilloso en verdad», aseguró.
Campeón toda la vida
Sin embargo, no sólo los futbolistas son los que sienten ese vínculo con la hinchada de la U, sino que también los técnicos que pasaron por el club como Martín Lasarte resaltan la experiencia de ser campeón con la camiseta azul.
«Tras irnos de Chile, la afición de la U siempre nos puja, nos manda mensajes por las redes sociales. Yo tengo mucha gente que me alegra desde allá y feliz que sea así, sea por el título conseguido o como sea», comentó Machete.
Por otra parte, el héroe azul en El Salvador, Patricio Mardones, a pesar de tener un extenso pasado como jugador de la Universidad Católica, su gol a Cobresal que significó un título para la U después de 25 años, lo elevó a la categoría de ídolo.
«Lo mejor es cuando el árbitro toca el pitazo final, acompañado con un gol mío que más encima significa el campeonato después de 25 años que te desahoga y es una celebración eufórica e inmediata», recuerda
«La sensación es muy rica de ganar un campeonato, sobre todo por cómo se dio éste, por eso se disfruta tanto y la gente que lo disfruto es lo más importante», terminó el actual director de Azul Azul tras el triunfo 1-0 de los laicos sobre San Luis, que significó la corona 18 en la historia del club.
