Era la ocasión perfecta para tomarse revancha de Alemania y de paso asegurar el paso a las semifinales de la Copa Confederaciones. Chile enfrentaba por la segunda fecha del Grupo B a la selección dirigida por Joachim Low y lo hacía con el recuerdo intacto de ese amistoso disputado en 2014, donde los alemanes vencieron por 1 a 0 en uno de los mejores partidos que ha tenido la Roja en su último tiempo.
PUBLICIDAD
Arturo Vidal ya había anticipado en la previa del encuentro que saldrían a jugar a Kazán con ese partido en la memoria y en busca de una ansiada revancha que venía esperando tres años. Los dichos del Rey Arturo no fueron al aire y Chile rápidamente dañó la maquinaria alemana. Cuando se jugaban sólo cinco minutos, el propio volante aprovechó una mala salida de los alemanes y le dejó en bandeja la pelota a Alexis Sánchez, quien mostró toda su categoría para definir de zurdo y batir el arco defendido por Marc-André ter Stegen.
En la Roja todo era alegría. Un tempranero gol que les permitía calmar la ansiedad y hacía presagiar una cómoda victoria contra el equipo B de Alemania. Además, por si fuera poco, Maravilla sumaba su gol 38 en la selección chilena para convertirse en el máximo goleador histórico, superando los 37 tantos que consiguió Marcelo Salas.
Nada le salía mal a la Roja y así lo demostraron en la cancha. Comandados por Arturo Vidal y Alexis Sánchez, la selección volvía a mostrar ese nivel que tuvo en el recordado amistoso de 2014 y era ampliamente superior a Alemania. Llegadas claras de gol así lo dejaban en claro, pero el finiquito falló y el marcador no se movía. El electrónico tenía impreso un peligroso 1 a 0 en favor de Chile.
Y como al campeón del mundo hay que respetarlo aunque tenga el equipo B, ese peligroso 1 a 0 se transformó en un empate. La Roja, pese al dominio que mostraba en cancha y a tener en las cuerdas a su rival, pagó caro la buena jugada que tuvo Alemania en el primer tiempo. En los minutos finales, a los 42, Jonas Héctor sacó un centro al área y Lars Stindl definió con arco descubierto para marcar la igualdad. El 1 a 1 llegaba al filo del descanso y lanzaba un balde de agua fría a los seleccionados chilenos.
El golpe dolió
Ese gol cuando el árbitro Alireza Faghani ya miraba su reloj para ver cuanto faltaba para terminar el primer tiempo le dolió a la Roja. La intensidad en el complemento no fue la misma y las llegadas claras del primer tiempo desaparecieron. Ese travesaño que tuvo Eduardo Vargas en la primera parte o los remates de Alexis Sánchez y Arturo Vidal desaparecieron en los últimos 45 minutos.
Así, Alemania demostró su orden en el complemento, se sintió cómodo en la cancha y amargó esa revancha que Vidal ansiaba hace tres años. Sin la potencia física que mostró en el primer tiempo, la Roja se quedó sin bencina y chocó con el lado B del campeón del mundo. El empate a un tanto se sentenció en un segundo tiempo que no tuvo mayores emociones y que dejó un resultado que le sirvió a ambas selecciones.
Con esta igualdad, Chile y Alemania sumaron cuatro puntos, pero los dirigidos de Juan Antonio Pizzi lideran el grupo B por la diferencia de goles. Ahora, la selección buscará ante Australia su paso a las semifinales, el próximo domingo a las 11:00 horas en el estadio del Spartak de Moscú. Al menos, los jugadores se quedan con la tranquilidad que le dieron pelea al campeón mundial y que un empate e, incluso, una derrota por 1 a 0 ante los Socceroos les sirve para meterse en la ronda de los cuatro mejores.