El tenista neozelandés Alex Hunt, de 23 años, ganó su primer punto como profesional. Hasta allí, nada del otro mundo como si fuera un jugador cualquiera del circuito de la ATP, pero no es así.
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Hunt es un ejemplo para millones y es una historia que es digna de contar para todo el planeta. El oceánico nació sin brazo por debajo del codo izquierdo, pero esto no le impidió cumplir una epopeya que está para una película que muestre el poder de superación de este muchacho.
El gran Hunt debutó con un triunfo 6-0 y 6-0 en el Futuro 1 de Guam, al derrotar al tenista de las Islas Marianas del Norte, Christopher Cajigan, en apenas 48 minutos de juego, mostrando su gran tenis.
Es dueño de una potente derecha, digno de un jugador top. Su ejemplo de superación es brillante y desde los tres años comenzó a jugar tenis, sin importarle su discapacidad.
Su ídolo es el suizo Roger Federer y gracias a una prótesis pudo iniciar su carrera más en serio, hasta este día, donde logró su primera unidad para el ranking de la ATP.
Luego fue eliminado en segunda vuelta por el primer cabeza de serie del torneo, pero ya hizo historia. Hunt ya ganó un partido más importante, el de la vida y el del esfuerzo de demostrar que todo es posible.
