Claudio Bravo fue la gran figura de la selección chilena en el paso a la final de la Copa Confederaciones. Luego que la igualdad sin goles ante Portugal no se pudiera romper ni en los 90 minutos ni en el alargue, el primer finalista se tuvo que definir en los lanzamientos penales y ahí el capitán fue figura. Con tres tapadas en tres tiros, el arquero le dio el triunfo en la tanda por 3 a 0 y la posibilidad de pelear por un nuevo título.
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Sin darle posibilidad alguna a los lusos de anotar, tras atajar los remates de Ricardo Quaresma, Joao Moutinho y Nani, Claudio Bravo reconoció tras su gran jornada que tenía estudiado a los ejecutantes del rival de turno.
«Tengo que seguir aportando mucho más. La felicidad es por mis compañeros, porque hemos peleado con el corazón y nos vamos con una satisfacción enorme al ganar ante el campeón de Europa. Hicimos un partido inteligente, con un marcador en cero, y al final tuvimos el gol. Los penales los teníamos claro, los estudiamos, y tenía clara mi labor«, dijo el arquero nacional.
«Lógico, se compite siempre con ellos y estamos habituados a competir contra grandes jugadores, y salimos victoriosos. Somos un grupo fuerte psicológicamente. Este equipo nunca se da por vencido y estábamos convencidos de nuestras cualidades. Teníamos claro lo que teníamos que hacer en los penales, tanto los que ejecutaban y yo en lo mío. Además, tenemos experiencia en estas instancias y nos vamos muy felices. Esperamos salir airosos de esta final», agregó.
Bravo, por último, le envió un mensaje al hincha de la Roja y llamó a la calma, ya que aún resta el paso más importante: «que la gente disfrute y no celebren todavía, queda un paso todavía. Estamos con los pies bien puestos en la tierra. Hoy hicimos un esfuerzo enorme, muchos compañeros terminaron acalambrados y debemos disfrutar de esta selección y cuidarla. Desde que ponemos un pie acá (convocatorias de selección) que queremos dar el máximo y por eso compañeros han superado récords. Eso abre más el apetito, quiero que nos sigan respetando y dejar la vara alta no como era en los otros tiempos».