La selección alemana se consagró campeona de la Eurocopa Sub 21, derrotando en la final a la España de Gerard Deulofeu y compañía por 1-0, dando otra prueba del poderoso recambio que posee, además de la identidad de juego que ha logrado en los últimos años. La «mini Mannschaft» se dio el lujo de armar un equipo sin la presencia de Joshua Kimmich, Matthias Ginter, Benjamin Henrichs, Julian Brandt, Leon Goretzka y Timo Werner, quienes están con la selección adulta en la Copa Confederaciones.
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Todos estos destacados jugadores participaron de la fase clasificatoria para la cita de Polonia. Además, eran elegibles ya que todos cumplían con el requisito de haber nacido en 1994 o después.
En el cuadro que se coronó en tierras polacas destacaron varios jugadores que podrían ser opciones para Joachim Low en la adulta a mediano o largo plazo, partiendo por el arquero Julian Pollersbeck del Kaiserslautern, quien se transformó en figura tras la tanda de penales en semifinales contra Inglaterra, instancia en la cual utilizó un papel con información para detener los lanzamientos.
La columna vertebral de esta escuadra continúa con el lateral derecho Jeremy Toljan (Hoffenheim), los volantes Maximilian Meyer (Schalke 04), Serge Gnabry (Bayern Munich) y el delantero revelación de la Bundesliga con el RB Leipzig, Davie Selke, quién pasó recientemente al Hertha Berlín.
Párrafo aparte merece el mejor jugador de este equipo, además de capitán, Maximilian Arnold. El volante ofensivo del Wolfsburgo es titular indiscutido en el cuadro de los «Lobos» desde hace varias temporadas y asoma como el reemplazo ideal de Mesut Özil, compañero de Alexis Sánchez en el Arsenal.
En esta Eurocopa de Polonia, los dirigidos por Stefan Kuntz derrotaron a República Checa por 2-0, Dinamarca con un contundente 3-0 y por la mínima a los hispanos en la definición. Mientras tanto, empataron sin goles en la semifinal contra Inglaterra, imponiéndose 4-3 en penales, y sólo cayeron ante Italia en la fase de grupos por 1-0.
