La estadía de Óscar Meneses como gerente deportivo de Blanco y Negro, cada vez, suma más rechazo al interior del directorio de Blanco y Negro. Al ex DT incluso le cuestionan su continuidad y por lo mismo, se evalúa solicitar su renuncia en la próxima Junta de Directorio.
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El mal manejo que ha tenido el dirigente en temas importantes y tomarse vacaciones en los últimos dos períodos de fichajes no han sido bien vistos por la cúpula de ByN. A eso, se suma su nula relación con el entrenador Pablo Guede con quien, ha tenido varias diferencias al punto de no cruzarse palabras con el argentino.
Es más, en la pretemporada que se realizó en La Serena, el dirigente llegó recién el miércoles a la cuarta región y se dejó ver en un par de entrenamientos, pero no conversó con el técnico. Para colmo lo responsabilizan como el culpable en la demora de la llegada del CTI de Jorge Valdivia, quien este domingo se perderá la revancha ante Deportes La Serena por Copa Chile.
«Él como gerente deportivo debe estar al tanto de todas estas situaciones. Es él quién debe solicitar el transfer de los jugadores y no puede ser posible que se haya demorado en gestionar el pase del Mago», señaló un miembro del directorio de ByN a El Gráfico Chile.
«Su trabajo está en duda y además se tomó vacaciones en pleno periodo de fichajes. Su labor nos deja dudas y estamos evaluando solicitarle la renuncia», agregó la fuente.
Para la concesionaria, despedir a Meneses significa una alta suma de dinero, puesto que tiene contrato hasta el 2018 y gana 12 millones de pesos mensuales, y en ByN no tienen «caja» para gastar una indemnización para el gerente deportivo.
La estadía de Meneses ya comenzó a agotar la paciencia y su continuidad se resolverá en la próxima Junta de Directorio.
