El fútbol chileno hace varias temporadas que no hace ruido en torneos internacionales. Tanto en la Copa Libertadores como en la Copa Sudamericana, los elencos nacionales no dieron tono y al terminar la fase grupal de la Libertadores y la primera ronda de la Sudamericana de los ocho equipos solo dos quedaron con vida.
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Y ambos fueron eliminados sin apelación en la segunda etapa de la Sudamericana, ampliando el desastroso presente que vive Chile en los campeonatos de clubes que organiza Conmebol.
A continuación, contamos como fue la participación criolla en este primer semestre en los certámenes continentales, con casi puras decepciones.
Copa Libertadores
Universidad Católica: Era la gran carta chilena en el máximo torneo continental, pero se topó con un grupo muy complicado con dos brasileños (Flamengo y Atlético Paranaense) y un argentino (San Lorenzo). La UC dio batalla, pero terminó cediendo en el partido final ante el Furaçao y quedó en el último puesto de la zona, sin opción de, al menos, clasificar a la Sudamericana como tercero.
Deportes Iquique: El cuadro nortino sacó la cara por Chile, pero aún así no le dio para avanzar a octavos de final de la Libertadores. Terminó tercero en su grupo al vencer en dos ocasiones a Zamora de Venezuela y lograr un valioso triunfo ante Gremio de Brasil. Sin embargo, ante su rival directo Guaraní de Paraguay, perdió de local y no pasó del empate en Asunción, condenando su opción pese a sumar 10 puntos. Al menos pasó a la Sudamericana en el segundo semestre, donde sucumbió sin atenuantes ante Independiente de Argentina.
Colo Colo: Otro fracaso más del Cacique en torneos internacionales, como ya es costumbre en los últimos 10 años. Los albos disputaron la segunda ronda preliminar del torneo y el sorteo los ubicó ante Botafogo de Brasil, rival difícil, pero no imposible. En la ida cayeron por 2-1 en Río de Janeiro y en la revancha igualaron 1-1 cuando fueron ganando casi todo el partido en el Monumental. Así, los de Pablo Guede ni siquiera avanzaron a la última etapa clasificatoria, donde al menos podían disputar un cupo en la Sudamericana y se quedaron sin torneo internacional por el resto del año, recién en febrero.
Unión Española: Los hispanos comenzaron bien en la segunda ronda preliminar, eliminando sin problemas al modesto Cerro de Uruguay. Sin embargo, en la última llave para ingresar a la fase de grupos se midieron con The Strongest de Bolivia fueron humillados sin piedad. Tras igualar 1-1 en Santa Laura, los de Martín Palermo cayeron 5-0 en la altura de La Paz y se despidieron de toda opción internacional, ya que no pudieron alcanzar uno de los dos cupos de mejores perdedores que iban a la Sudamericana.
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Copa Sudamericana
O’Higgins: Tenía todo para pasar de ronda, tras vencer como local en Rancagua a Fuerza Amarilla de Ecuador por 1-0. Sin embargo, en la revancha los de Cristian Arán hicieron un pésimo partido y dejaron que su rival, antepenúltimo en el torneo ecuatoriano, los derrotara por 2-0 y los dejara fuera del certamen sin mayor apelación.
Everton: El cuadro de Pablo «Vitamina» Sánchez sufrió con la lotería de los penales, al caer mediante este expediente ante el desconocido Patriotas de Colombia en primera fase. Ganaron 1-0 en Viña y en la revancha cayeron por el mismo resultado en Tunja, y en la definición desde los 12 pasos sucumbieron por 4-3, diciendo adiós en el turno inicial.
Palestino: El elenco «árabe» superó apenas al totalmente desconocido Atlético Venezuela, pasando de forma milagrosa a segunda fase. En la ida en el Estadio Nacional, aún con Nicolás Córdova en la banca, cayó por 1-0 en una actuación para el olvido. Dos meses después vino la revancha en Caracas, ya con el argentino Germán Cavalieri como DT, los tetracolores ganaron de forma agónica por 1-0, forzando la definición por penales que ganaron por 7-6. En segunda fase, sucumbió de forma penosa ante Flamengo, siendo goleado 5-2 en Santiago y 5-0 en Brasil.
Universidad de Chile: Los azules, que entraron casi por la ventaja a la Sudamericana, fueron víctimas del sorteo y tuvieron que medirse en primera fase al todo poderoso Corinthians de Brasil. El equipo de Ángel Guillermo Hoyos, que recién se afirmaba en un semestre que terminó con el título del Torneo de Clausura, poco pudo hacer ante el Timao que los venció por 2-0 en Sao Paulo y luego remató su faena en el Nacional con un 2-1.
De esta manera, los ocho elencos nacionales quedaron fuera de toda carrera internacional en 2017, en un fútbol chileno que está cada vez más lejos de los primeros planos del balompié continental.