Tras casi un año al mando de Cobreloa, el técnico José Sulantay cerró definitivamente su paso por el cuadro loíno. Sin posibilidad de ascender a Primera División y con varias polémicas con los dirigentes, el experimentado estratega dirigió su último partido ante el campeón Unión La Calera donde cayó por 3-0.
PUBLICIDAD
Luego de una breve despedida del plantel, Sulantay analizó su paso por la ciudad y reveló todas las dificultades que tuvo que enfrentar junto al plantel durante sus últimas semanas al mando del equipo.
«Cobreloa quería ser campeón con muy poquito. Por ejemplo se demoraron 10 meses para tener una cancha medianamente decente para entrenar. No podemos viajar en las condiciones que venimos a Quillota; no se dio cena pese a que llegamos tarde, se comió poquito en el almuerzo de hoy, llegamos al estadio con un sandwich y una bebida. Soporté muchas cosas y debí irme antes, a si veces parecíamos equipo amateur«, denunció en conversación con El Mercurio de Calama.
Recomendado
¿Quiere formar una familia con Nicolás Solabarrieta?: Guarén se sinceró sobre su sueño de ser mamá
“Me dijeron que influí en ella”: Myriam Hernández reveló qué hablaron con Karol G durante su emotivo encuentro
“Es inocente”: María José Prieto desestima denuncia de abuso sexual y apoya a su marido Cristián Campos
El histórico entrenador, campeón de Primera División con los naranjas en 1992, también esbozó problemas al interior del camarín calameño, lo que le impidió un mejor rendimiento.
«Dentro del grupo hubieron cosas raras que después se van a saber, de seguro. Pero en el club tienen que hacer evaluación con los jugadores que hay dentro del camarín. Cuando los guerreros no disparan todos para el mismo lado, la guerra se pierde y el ejército se divide«, expresó.
Finalmente y tras varios años de carrera, parece que Sulantay colgará definitivamente el buzo y adelantó que «pese a que tengo mi vida hecha, hoy tengo dos ofertas pero dije que no. Ya he dicho antes que seguir en esto me sacaría de mi casa definitivamente y la verdad es que me ha costado mucho estar fuera de mi casa».