Por Pedro Marín Roldán, enviado especial a Concepción
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Dramatismo, emociones, alegrías, gritos, llantos e historia. Todo eso se conjugó en Concepción, ciudad histórica para Colo Colo, porque en dicha tierra se dirá que el equipo que más títulos ha ganado en Chile bajó la esquiva estrella 32, luego de derrotar en un apretado compromiso a Huachipato por 3-0.
El partido se estaba jugando desde el martes en Concepción, cuando los fanáticos albos provocaron desmanes a las afueras del estadio Ester Roa buscando una entrada. Como era de esperarse, el recinto de Collao se llenó, con una mayoría abrumante de fanáticos azules, que cantaron desde la previa y se pusieron nerviosos con el correr de los minutos.
En la cancha, el Cacique mostraba supremacía, aunque también tensión, porque llegaba al arco de Carlos Lampe solamente gracias a las escapadas de Jaime Valdés. Fue así como llegó la jugada más peligrosa a los 19′, con un zurdazo de media distancia de Pajarito que mandó al córner el meta boliviano.
El equipo de Pablo Guede jugaba con los resultados, porque el 0-0 no se movía en los tres partidos que se estaban jugando y eso les alcanzaba para ser campeón.
Los locales, en tanto, no querían ver una celebración en su cara y empezaban a molestar a Agustín Orión. El ex seleccionado argentino se transformó en figura en los 44′, cuando el juvenil Javier Urzúa metió un derechazo colocado, que pudo despejar con lo justo para mandar al poste. Emoción pura en el sur.
Dramatismo
El complemento pasó de la calma a la presión, porque Colo Colo entró al terreno de juego confiado con los resultados que se estaban dando, pero el tanto de Gustavo Canales provocó una catarsis en Concepción. Con lo que estaba pasando había Súper Final.
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Rivero corría y buscaba espacios, Valdivia intentaba meter un pase en profundidad, Valdés quería echarse el equipo al hombro y Paredes presionaba con su potencia a los central. Pese a todo lo antes descrito, el gol no quería caer en el ex Municipal de Collao.
Unión ya ganaba 2-0 y los hinchas albos gritaban a más no poder, pidiendo aquel tanto que entregaría la estrella 32. Nada de eso, Lampe y compañía se salvaban. Una de las más claras la tuvo el juvenil Berríos, aunque no pudo y la tiró ancha.
Colo Colo campeón
Minuto 72, Berríos se escapó por la derecha y mandó un centro potente que pegó en la mano de Baeza. Julio Bascuñán no dudó y cobró penal. Jaime Valdés tomó la responsabilidad y con un derechazo potente abrió la cuenta. Las emociones eran al por mayor, porque dicho tanto la deba el título 32 a los de Macul.
Luego del 1-0 no paró de atacar el conjunto forastero. Rivero, Valdés, Berríos y Paredes probaban de todos lados, pero siempre se encontraron con Lampe, que probablemente jugó su último partido con la camiseta de Huachipato.
Los acereros también tenían algunas opciones, y en la más clara casi silencian al Ester Roa, porque el recién ingresado Kevin Hidalgo metió un centro desde la derecha, que se cerró y pegó en el horizontal.
La fiesta fue total en los 82′, cuando luego de un contragolpe letal, Valdés dejó mano a mano a Rivero con Lampe, y el uruguayo, que a principio de torneo se quería ir, selló una victoria que se transforma en la estrella 32 para el equipo que más títulos ha ganado en el país.
Y cuando se jugaban los descuentos, cayó el último tanto, de la mano de Nicolás Orellana, quien se metió por la ventana al plantel de honor.
El Cacique se sacó todas las mufas, ganó un torneo que desde el comienzo aquello parecía imposible y por fin Pablo Guede ganó su primer título en Campeonatos Nacionales como DT.
Colo Colo es el mejor del Transición y gran parte de Chile está de fiesta. ¡Salud campeones!
Así vivimos el minuto a minuto
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