«Si se va David, se va el fútbol«, dijo el técnico de Universidad de Chile, Guillermo Hoyos, en la práctica del jueves en el Centro Deportivo Azul y luego de una de las tantas conversaciones que tuvo el DT con el volante David Pizarro. El Fantasista tenía decidido retirarse este 2017, pero tras varios meses replanteando la situación, decidió jugar un año más pensando en la Copa Libertadores 2018.
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Además de Hoyos, la dirigencia de Azul Azul le insistió por mucho tiempo al mediocampista para que jugara una temporada más en el club, luego de su gran año con los universitarios, pero manteniendo el acuerdo inicial que habían hecho sobre la decisión de su retiro profesional.
«Nosotros siempre dijimos que se iba a respetar lo que él piense hacer. Ojalá siguiese para la Libertadores, pero hay que respetar su forma de pensar y lo que quiere hacer«, dijo hace unos días el presidente de la U, Carlos Heller, a radio Bío Bío.
Según señaló el mandamás de la concesionaria de la U, la dirigencia le tenía preparada una despedida de homenaje si es que decidía dejar el fútbol el pasado sábado, pero no se realizó luego de que ambas partes decidieran extender el vínculo por un año más y sin revisión de contrato a mitad del 2018, pero siempre supeditado a la condición física que pueda tener el volante el próximo año, cuando cumpla 39 años.
Aparte de su condición física, la continuidad de Pek en la U también se revisará conforme a lo que pueda hacer el equipo de Hoyos en la Libertadores, torneo que Pizarro quiere disputar para así cerrar de la mejor forma sus casi 22 años como futbolista profesional.