El defensa colombiano Yerry Mina fichó en el Barcelona, confirmando su gran talento y proyección que mostró en el fútbol sudamericano en los últimos años, por su gran exuberancia física y habilidad única para su posición.
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Y eso lo sufrió un equipo chileno en 2015. Fue Colo Colo, que en la Copa Libertadores de ese año al enfrentar a Independiente Santa Fe de Colombia, conoció de cerca el potencial de Mina.
En el duelo disputado en abril de ese año en el estadio Monumental, el Cacique necesitaba un triunfo para avanzar a octavos de final del certamen, pero los colombianos los pasaron por encima. Un 3-0 rotundo y con el joven zaguero como enorme figura, que incluyó un gol de cabeza y una celebración particular.
Con la cuenta 2-0 para los de Bogotá, Mina se anticipó a toda la defensa y metió un cabezazo para vencer a Paulo Garcés, sentenciando el 3-0 final dejando en silencio al recinto de Macul.
Aparición tremenda
Pocos días después de fichar a Philippe Coutinho para reforzar la ofensiva, Barcelona fortaleció su defensa con Mina, conocido por sus elegantes movimientos de baile al festejar un gol, tal como lo mostró esa vez en el Monumental.
Defensor sólido, Mina también suele ser peligroso en el área enemiga, y su baile al festejar un gol con frecuencia se vuelve viral como lo hizo en Palmeiras de Brasil. De hecho, el zaguero es clave en la selección Colombia que jugará el Mundial de Rusia.
El líder de la liga española pagó 14 millones de dólares por Mina, que fichó hasta junio de 2023 con una cláusula de rescisión de 119 millones de dólares. El defensa es un jugador alto y veloz que será el primer colombiano en disputar un partido oficial con el Barça. Con 1,95 metros de estatura, será el jugador más alto del equipo.
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Además, es conocido por su velocidad y audacia. Suele adelantarse y es peligroso en el área enemiga gracias a su estatura. Anotó la mayoría de sus goles para Palmeiras, donde consiguió nueve goles en 49 partidos.
