Por Gonzalo Pérez Amar, enviado especial a Belén
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La suspensión de la novena etapa supuso un pequeño descanso para los pilotos del Rally Dakar 2018. Luego de largos días de competencia, las lluvias generaron problemas en las rutas por las que pasaría la especial que recorría desde Tupiza a Salta y la organización decidió suspender el trayecto.
Un descanso que sólo fue una pequeña luz para lo que se les vino en la décima etapa, que tuvo un recorrido desde Salta a Belén. En una especial llena de incidentes, donde muchos pilotos se perdieron, entre ellos uno de los candidatos al título, Kevin Benavides, la peor parte se la llevó el que lideraba la clasificación general: Adrien Van Beveren.
Aunque no fue afectado por perderse en la ruta, el francés sufrió una dura caída a sólo tres kilómetros de la meta de la décima etapa y se vio obligado a retirarse, terminando con su sueño de de conquistar el Dakar por primera vez.
Van Beveren venía corriendo muy fuerte para llegar al final de la especial y fue ahí cuando comenzó a rodar por la arena. Luego de ser examinado por los médicos, se le diagnosticó una fractura de clavícula derecha, un traumatismo torácico y de raquis dorsal.
El francés de Yamaha tuvo que ser trasladado en helicóptero hasta el campamento ubicado en el polideportivo de Belén y luego a un centro hospitalario para ser atendido.