Aunque a varios no les guste, aunque muchos sigan añorando a Figueroa-Quintano, aunque ni siquiera sean sus puestos originales, Medel-Jara está en la historia como la única dupla de centrales que ha llevado al fútbol chileno a lo más alto. Sin embargo, esa pareja parece estar llegando a su fin.
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De a poco, Rueda ha ido deslizando su idea de juego y todo indica que su primera metida de mano será en la línea de fondo. Sin siquiera pedírselo, en su conferencia de presentación puso sobre la mesa el apellido Sierralta, ratificándolo en la semana que acaba con una visita en Italia.
También en su rueda de prensa de estreno como DT de la Selección, no se cerró a la posibilidad de que Gary vuelva a la mitad de la cancha, algo impensado en los procesos recientes. “No se puede ser categórico en qué posición va a jugar, porque después me van a reclamar que dije que iba a hacerlo en tal y termina jugando en otra”, avisó.
Y es cosa de revisar lo hecho en sus anteriores equipos para reforzar la teoría. Los zagueros del Flamengo finalista de la última Sudamericana y del Atlético Nacional campéon de la Libertadores 2016 no bajaban del metro ochenta, con Réver (1.92) y Juan (1.82) en el caso de los brasileños, y Davinson Sánchez (1.88) y Alexis Henríquez (1.91) en el de los colombianos.
¿Y en las selecciones? El más bajo de los ecuatorianos en Brasil 2014 fue Jorge Guagua (1.81), acompañado de Frickson Erazo (1.93), mientras que los hondureños en Sudáfrica 2010 contaron con Osman Chávez (1.88) y Maynor Figueroa (1.84), todos por encima del Pitbull (1.71) y de Jarita (1.78).
No es casualidad que el entrenador haya sacado al baile al defensa del Parma (1.92) y haya pasado a ver a Maripán (1.93) a España. Como tampoco sería raro que Medel volviera al mediocampo, ya que en cuadros equilibrados, como le gustan al caleño, la presencia de un perro de caza en la zona de contención es fundamental.
¿Que son muy jóvenes para ser titulares? No se confunda, la edad no será un problema, pues Davinson levantó el máximo título continental de clubes con apenas 20 años recién cumplidos.
Llámelo recambio o como quiera, pero todo apunta a que la renovación de la Roja empezará por sus ruedas traseras.