Si la fecha semana pasada fue el gran responsable que Colo Colo perdiera por 2 a 1 ante Palestino, ahora, ante O’Higgins por la cuarta jornada del Campeonato Nacional, Agustín Orión se transformó en la figura de los albos para que, al menos, pudieran sumar un punto en el Monumental y evitar una derrota que a nadie le hubiese extrañado por lo que mostraron.
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Es que el equipo de Pablo Guede sufrió, sobre todo en el primer tiempo, con los de Rancagua y ahí el arquero tuvo que sacar a relucir su mejor repertorio para que el Cacique no sume dos derrotas al hilo en el torneo local y no llegaran con la moral tan en el piso a enfrentar a Atlético Nacional por la Copa Libertadores, el próximo martes a las 21:30 horas en el Estadio Monumental.
Así, Orión, que dejó la camiseta amarilla, aquella que ha ocupado dos veces y sólo ha sumado derrotas, y volvió al negro, tuvo tapadas que todos aplaudieron en Macul y que rápidamente hicieron olvidar el error cometido la semana pasada, cuando salió fuera de su área a intentar sin éxito despejar una pelota, dejándole el arco descubierto a Roberto Gutiérrez para que marque el 2 a 1 definitivo. Sin embargo, ante O’Higgins sus espectaculares atajadas le permitieron a Guede y sus pupilos sacar un punto.
El buen trabajo de Orión comenzó en los 24 minutos del primer tiempo, cuando evitó la apertura del marcador al atajar un cabezazo a quemarropa de Nicolás Oroz. Luego, en el segundo tiempo y con O’Higgins ganando por 1 a 0, tuvo una aún mejor al sacar un testazo en el área chica de Nicolás Mazzola, llegando abajo para despejar con la mano izquierda.
Una contundente actuación que le devuelve la confianza a nivel personal, ya que los hinchas nunca le condenaron el error cometido ante los árabes y sólo recordaron las buenas actuaciones que tuvo para el campeonato que obtuvieron en el pasado Transición.
