La cara de Andrés Iniesta lo decía todo. Su rostro tras la eliminación del Barcelona a manos de la Roma en los cuartos de final de la Champions League sólo expresaba dolor y tristeza. Y es que el 3-0 en el Olímpico de la capital italiana lo golpeó más que a nadie.
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“Estas cosas pasan en competiciones como esta. Hemos fallado. Es una decepción muy grande, es jodido”, reconoció el volante a los medios de comunicación, al dar la cara de un plantel abatido.
“Sabíamos que ellos no tenían nada que perder. Es un mal día para dar mensajes. Estamos dolidos. Vamos a intentar conseguir liga y copa. Pudo haber sido mi último partido en Champions con el Barca”, aseguró el campeón del mundo en Sudáfrica 2010.
“Es difícil, pero no queda otra. El sábado tenemos otro partido e intentaremos dar el máximo”, cerró en los vestuarios romanos.
